La mayor fiesta a cielo abierto del mundo comenzó en medio de voces de alerta de las autoridades ante la posibilidad de que el virus se propague, en especial para las embarazadas
Alegría carioca. El Rey Momo dio el pistoletazo de inicio ayer a las 12.06 bajo una lluvia de confites y música.
Brasil se sumergió ayer en el carnaval y dio inicio a cinco días de fiesta continua, en pleno estado de emergencia por el zika.
El carnaval de Río de Janeiro prometía ser una vacuna de samba y seducción contra el zika y la recesión económica, pero la posibilidad de que el virus pueda transmitirse a través de la saliva tiene el potencial de aguar los planes de miles de fiesteros.
Las autoridades brasileñas dijeron que las mujeres embarazadas deben precaverse de besar, sobre todo a extraños, en el día del inicio de la mayor fiesta a cielo abierto del mundo, donde todos intentan olvidarse los problemas y exudan oscuras fantasías, y donde muchos compiten por quién roba más besos en la boca, una tradición que ahora puede provocar temores.
Científicos de Brasil, país donde hay un millón y medio de personas infectadas y es el país más castigado, detectaron "virus activos con capacidad de infección" del zika en orina y saliva (ver recuadro).
El zika ha sido vinculado a una explosión de bebés nacidos con microcefalia en Brasil y otros países de Latinoamérica, y también al aumento de síndromes neurológicos como el de Guillain Barré, que provoca parálisis en niños y adultos y que provocó tres muertes, anunciadas ayer, en Colombia (página siguiente).
Cinco millones de personas —un millón de turistas incluidos— ya están sambando, sudando y consumiendo miles de litros de cerveza en 505 "blocos" o grupos de carnaval callejero que desfilan desde hace dos semanas por la ciudad con originales y minúsculos disfraces, aunque el inicio oficial del carnaval fue decretado recién ayer por el rey Momo.
"Va a haber miedo, sí, pero igual todo el mundo se va a besar como siempre. ¡Creo que deberían haber preservativos de boca!", dijo una joven, Beatriz de Souza, de 28 años, asidua del carnaval callejero.
Antes del anuncio de la Fiocruz, las autoridades de Río no se mostraron inquietas.
El pistoletazo de salida a la fiesta lo dio a las 12.06 hora local, bajo una lluvia de confeti, el Rey Momo, figura que encarna el carnaval y que, de forma metafórica, reemplazará hasta el próximo martes a las autoridades de Río.
El Rey Momo, que como manda la tradición, es un hombre negro, gordo, alegre y hábil en el zapateado y en los contoneos típicos de la samba, tomó las llaves de la ciudad de manos del alcalde carioca, Eduardo Paes.
Antes de ceder el testigo, el alcalde aprovechó para pedir a la población que por el carnaval "no se olviden" de la lucha contra el mosquito Aedes aegypti, el responsable de transmitir el dengue y el zika.
"La gente está tomando precauciones, el zika es algo desconocido pero quien vive aquí en Brasil sabe que el dengue es mucho mas traumático", dijo el alcalde Paes.
El zika no ha mermado la cantidad de turistas en carnaval, "la ciudad está llena y la ocupación de hoteles en 90 por ciento", aseguró por su parte el secretario de Turismo de Río, Antonio Pedro Figueira de Mello.
Cerca de 130.000 turistas arribarán a bordo de cruceros, lo que supone un aumento del 85 por ciento con respecto al año pasado.
"Que las personas se cuiden, se coloquen repelente y salgan a divertirse en este carnaval. Y en los Juegos Olímpicos el brote será mucho más leve, principalmente porque será invierno en la ciudad y no tendremos una proliferación de mosquitos", añadió.
Como parte del combate al mosquito vector del zika, el famoso Sambódromo que recibirá los lujosos desfiles de las escuelas de samba en las noches de mañana y el lunes, fue fumigado.
Neymar y Pelé. En los inmensos y calurosos galpones de la Ciudad de la Samba, en tanto, un ejército de artesanos, bailarines, coreógrafos y voluntarios trabajan como hormigas para dar los aprontes finales a los desfiles de las 12 mejores escuelas.
Todas desfilarán a lo largo de los 700 metros de la avenida Sapucaí del Sambódromo por el título de "campeona de carnaval" ante más de 70.000 espectadores.
Astros del fútbol brasileño como el joven Neymar (23 años), en problemas judiciales por las comisiones e impuestos de su pase al Barcelona, y el mayor futbolista de todos los tiempos, Pelé (75), serán homenajeados mañana por la escuela Grande Rio, que dedica su enredo o tema del desfile a la ciudad paulista de Santos y a su club de fútbol, que vio nacer a estos ídolos.
Otra escuela, Uniao da Ilha, ha escogido los Juegos Olímpicos que Rio acogerá el 5 de agosto como tema por sugerencia del alcalde: los dioses salen del Olimpo para conocer la "cidade maravilhosa", se enamoran y deciden quedarse allí para siempre.
El director de la escuela, Marcio André Mehry de Souza, lamenta no obstante la falta de auspicio de Rio-2016 o del gobierno para financiar un desfile que se augura deslustrado en medio de una profunda recesión económica.
"La situación es difícil desde hace cuatro o cinco años. Pero este año ha sido peor porque todo el mundo está en crisis y porque el precio de los materiales aumentó".
No hay comentarios:
Publicar un comentario