Está tranquilo, trata de disfrutar al máximo esta semana apasionante para el fútbol rosarino y guarda bajo siete llaves la formación del equipo que saltará al Coloso mañana, a las 15.
La Capital |
“Estoy disfrutando muchísimo. Esta semana es especial. Los jugadores están muy bien. Trabajamos como queríamos y estamos disfrutando entre todos de cómo se vive el clásico en Rosario. Después se sabe que lo que pasa en la previa es secundario. Importa lo que ocurre adentro de la cancha. Todo lo que decimos ahora no tiene ningún valor, después ustedes (la prensa) analizan el resultado”, indicó el DT.
—¿Cómo se maneja en estos clásicos la cuestión de la idea futbolística y la importancia del resultado? Porque se dice que hay que ganar sí o sí.
—Me parece que si uno busca en porcentajes las victorias de un equipo que no jugó mejor que el rival son muy pocas. Uno puede ganar y jugar mal, pero a lo largo del tiempo es el menor porcentaje. Creo que el que menos hace es el que menos gana. Siempre pesamos que hay que ser protagonistas de los partidos para poder ganarlos.
—¿Cómo manejás la situación con los jugadores más jóvenes del plantel, respecto a la presión de la gente?
—Es obvio que hay mucha presión, sobre todo periodística sobre si estarán o no a la altura. Pero acá adentro trabajamos para que todos los jugadores estén en las mismas condiciones. Ya jugaron algunos partidos y estuvieron a la altura de sus compañeros y ojalá puedan estar bien el domingo.
—¿Qué tipo de partido imaginás?
—Todos esperamos que los dos equipos jueguen de la manera que lo vienen haciendo, pero a veces con la presión del partido puede no salir así. Para nosotros es más conveniente que salga un trámite abierto. Si se hace un partido trabado será incómodo para los dos. Nosotros estamos más cómodos en un encuentro abierto. Es muy difícil vaticinar una forma de juego porque los clásicos tienen muchas situaciones cambiantes. Uno a veces piensa una cosa y a veces no sale por la presión de la gente. Ojalá que salga un partido lindo y que se pueda disfrutar. Esperemos que podamos dominar el juego, tener el control de la pelota y lograr el resultado que queremos.
—¿Se piensa en los clásicos anteriores por las obligaciones de uno u otro equipo?
—En mi pensamiento este es un proceso nuevo. Al pasado nunca lo puse en valor en ningún momento. Las obligaciones nuestras están en este clásico, en el presente y en el futuro. No tenemos nada que decir ni ninguna obligación de lo que pasó antes. Porque si volvemos al pasado el rival también estuvo 22 años sin ganar en el Parque. Así que cada uno puede tomar el pasado a la manera que le convenga, pero yo no lo hago porque no me interesa. Lo que pasó ya está y vamos por lo que ahora hay en juego.
—¿Los jugadores de jerarquía pueden torcer el trámite?
—Seguro, cuando los equipos son parejos los jugadores de jerarquía hacen la diferencia. Pero si no logramos intensidad colectiva es difícil que la jerarquía se imponga. Necesitamos tener un rendimiento parejo como equipo para poder ganar.
—¿Pensás que Central puede jugar de contraataque?
—No creo que lo haga. Me parece que hoy ocupan un lugar en la tabla donde también tienen la responsabilidad. Muchos de sus jugadores atraviesan un buen momento y vendrán a buscarlo. Nosotros estamos en un momento de crecimiento y tenemos nuestra responsabilidad porque es un clásico y además jugamos de local.
—¿Qué opinás del árbitro Néstor Pitana?
—A los árbitros hay que dejarlos tranquilos. Lamentablemente estamos en un fútbol donde está todo cuestionado por un montón de cosas que han pasado. Pretendo que tenga el mejor partido posible y que no se equivoque para ninguno de los dos. Pitana dirigió el Mundial y la Copa América. De las opciones era una de las mejores que le pudo tocar al clásico.
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