El negocio está ubicado en la zona sur, a cuadras de la comisaría 11ª. Las dos últimas irrupciones de ladrones armados las sufrió el domingo y el martes pasados.
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No, ni la Pascua le dio descanso a Oscar y su esposa, Silvia, dueños del local abierto hace 8 años y ubicado a unas pocas cuadras de la comisaría 11ª.
Oscar explicó que la situación de inseguridad se acentuó sobre todo en los últimos cuatro años.
Y que la mecánica de los dos últimos robos fueron similares a las de los anteriores: ladrones muy jóvenes, armados, que en general llegan en moto.
Para el comerciante, el problema es la falta de patrullajes preventivos, que según él no se cumplen pese a que los vecinos recibieron ya varias promesas.
Pero además, sosttuvo que “cuando llamás a la comisaría 11ª no tienen móviles o no tienen gente”.
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