Los profesionales de la salud anunciaron ayer un paro para el próximo martes en reclamo de mayores medidas de seguridad en los hospitales. La huelga se sentirá en los centros asistenciales que dependen tanto del municipio como de la provincia.
La Capital |
"Este año los hechos de violencia, agresiones e inseguridad en general subieron más un 50 por ciento respecto al año pasado", denunció Eduardo Taboada, secretario general de la seccional Santa Fe de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra).
En sintonía con los reclamos planteados por el Sindicato de Trabajadores Municipales, los médicos decretaron un paro con movilización para la semana próxima. "La medida de fuerza arrancará a las 10 con la idea de afectar lo menos posible a los pacientes", apuntó Taboada, quien garantizó que el martes se mantendrán las guardias mínimas en los hospitales.
La protesta se sentirá en todos los hospitales y centros de salud de la provincia, tanto los que dependen del gobierno santafesino como los que están bajo la órbita del municipio de Rosario. "En todos los efectores tenemos delegados y habrá alta adhesión", pronosticó Taboada.
Según el secretario general de la Amra Santa Fe, el motivo excluyente de la medida de fuerza será la seguridad. "Hace tiempo que venimos padeciendo tanto situaciones de agresividad y violencia de familiares de pacientes como robos. Recientemente hubo dos episodios que colmaron nuestra paciencia", precisó.
En ese sentido, mencionó "lo ocurrido semanas atrás en el hospital Roque Sáenz Peña de Rosario", donde tras una serie de enfrentamientos en la zona sur hubo un choque de familiares en la puerta del centro de salud; y "un incidente grave en la ciudad de Santa Fe", donde tras el fallecimiento de un paciente a raíz de un accidente de tránsito, fueron agredidos médicos y enfermeros.
"Hay que ponerle un punto final a estas situaciones; si bien los hospitales son de libre acceso, no debería ocurrir cualquier cosa. Hay que terminar con la impunidad de que quienes agreden a médicos y enfermeros no reciben nunca ninguna sanción", se quejó Taboada.
Consultado sobre las medidas que el sindicato exige a las autoridades municipales y provinciales para reducir progresivamente los hechos de inseguridad, el dirigente gremial señaló: "Para empezar hay que ubicar efectivos policiales especializados en el manejo de estas situaciones violentas, y no sólo personal de seguridad".
Taboada también avaló el planteo del sindicato municipal para colocar detector de metales en los ingresos a los efectores para que no ingresen armas a los hospitales.
"Ahora los hechos se están denunciando y estamos notando un incremento de por lo menos un 50 por ciento respecto al año pasado, tanto de situaciones de agresividad como incidentes de inseguridad en general", remató el dirigente.
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