Un grupo de gremios había
paralizado la operatoria durante el jueves. La CGT San Lorenzo insistió
con que la huelga estaba pospuesta. Interna gremial.
A poco más de 24 horas de que la
intersindical marítimo portuaria lanzara un paro bloqueando la actividad
fluvial de las agroexportaodras del Cordón, el Ministerio de Trabajo de
la Nación decretó la conciliación obligatoria por 15 días, disposición
que fue aceptada por una asamblea de trabajadores realizada en el puerto
municipal de esta ciudad.
A pesar de que el miércoles por la
noche la conducción de la CGT San Lorenzo había anunciado que postergaba
el paro en las agroexportadoras por 48 horas, los gremios de la
intersindical, que también son parte de la regional, lanzaron la medida.
Esta vez no hubo piquetes en las terminales, sino que la protesta se
concentró en bloquear la actividad fluvial que genera el embarque de
granos, medida que tuvo un impacto importante: según fuentes gremiales,
los barcos ya se habían comenzado a acumular en el Río de La Plata.
El eje de todo este conflicto tiene que
ver con la actualización del convenio Copa (Complejo Oleaginoso
Portuario Agroexportador) que el año pasado y después de un duro
conflicto fijó un piso salarial de 5 mil pesos para todos los
trabajadores de los puertos cerealeros, independientemente de su
encuadre gremial.
Ese convenio venció el 30 de marzo y
para este año la CGT viene reclamando un piso de 6.200 pesos. Hubo
varias instancias de diálogo, y desde fuentes empresariales sostienen
que ya estaba acordado con casi todos los gremios, por lo que no se
explican la medida.
Lo cierto es que durante la huelga hubo
contactos informales entre algunos miembros de la intersindical y las
patronales, y ahora deberá sentarse la CGT San Lorenzo con las empresas
para resolver el nuevo convenio.
La CGT confirma.
Mientras desde el ministerio se notificaba a las partes que se decretaba
la conciliación, en la sede de calle Riccheri al 700, y con la
presencia de varios dirigentes gremiales, la CGT San Lorenzo brindó una
conferencia de prensa para ratificar la decisión de postergar la medida y
explicar las razones.
José Aguirre, secretario general de la
central, remarcó: "Nosotros no levantamos el paro ni lo suspendimos,
sólo suspendimos el inicio a la espera de que los compañeros de algunos
gremios nos comuniquen por qué no habían asistido a las reuniones con
sus patronales. Nos llamaban los empresarios y nos decían que estaban
esperando a los gremios para cerrar un acuerdo, pero nunca vinieron al
Consejo Directivo a explicarnos qué estaba pasando".
Al ser consultado sobre los gremios que
no asistieron a las reuniones, Aguirre sostuvo que "no lo hicieron los
de vigiladores y los camioneros, que tenían que contestar cuando estaba
casi todo acordado. Esto no hace otra cosa que demorar el cobro del
nuevo convenio Copa", afirmó.
Por otra parte, reconoció que la
central sindical no tuvo "ningún tipo de comunicación con los compañeros
que estaban tomando la medida, y seguimos esperando a los gremios que
no fueron para comunicarle la nueva fecha de reunión con la patronal".
Interna al rojo
Como nunca, desde su normalización a
mediados de 2010, las diferencias gremiales en la central obrera
quedaron tan expuestas como en este conflicto. Consultado sobre el
fantasma de una disputa interna en el seno de la CGT San Lorenzo,
Aguirre sostuvo que “si se quiere debatir o cuestionar, se tiene que
hacer en la CGT; acá todo está abierto para el diálogo y nadie tiene una
silla comprada de por vida, pero que se haga dentro de la central”. Por
su parte, Edgardo Quiroga, secretario gremial de la entidad, sostuvo
que “esta es una medida de la CGT porque los gremios de la intersindical
la integran; por tanto, es una medida que está llevando adelante
nuestra regional”.
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