Una mujer de 34 años, que abandonó su hogar hace dos años, sigue sin aparecer y su familia está en una situación desesperante. Un triángulo amoroso, un embarazo reciente y cruces de llamadas, elementos de esta historia en la que no se descarta ninguna hipótesis.
Paula Perassi está casada y es madre de dos hijos varones de dos y seis años. El domingo 18 de septiembre, después de recibir una llamada desde una cabina pública cercana a su casa en la zona céntrica de San Lorenzo, salió con el pretexto de buscar la tarea para uno de sus hijos. Y nunca regresó.
Al día siguiente, su esposo, Rodolfo Ortiz, radicó una denuncia y desde allí comenzó una investigación que incluyó entrecruzamientos de llamadas, redes sociales y hasta el testimonio de una médica de Rosario, quien confirmó un embarazo de seis semanas al momento de su desaparición.
Por el caso hubo hasta ahora una persona demorada, un empresario de Puerto San Martín, y hasta un allanamiento en la localidad bonaerense de General Rodríguez donde vive un amigo de este último, pero no se pudo dar con Paula.
Otra relación. Sin bien la causa está orientada a la averiguación de paradero, dado que la mujer se fue por su propia voluntad, por el tiempo transcurrido no se descartan otras hipótesis, y sus familiares viven un momento de angustia ante la falta de respuestas. Con el correr de la investigación se supo que Paula mantenía una relación con Gabriel E., de Puerto San Martín y amigo de la familia.
Cuatro días antes de su desaparición, la mujer había recibido de un reconocido sanatorio rosarino la confirmación de un embarazo de seis semanas, según reveló luego la policía. Después de este hecho, las pericias indican que las llamadas y mensajes entre el teléfono de Paula y Gabriel aumentaron en forma considerable.
Si bien se pudo establecer que minutos antes de salir de su casa Paula recibió un llamada de un locutorio cercano, cuando se requirieron las imágenes de las cámaras internas ya habían sido borradas. Otro dato sorprendente es un mensaje que llegó desde el celular de Paula al de Gabriel, donde decía que se había marchado a la provincia de San Juan.
Demorado. Con todos estos elementos se demoró a Gabriel E., pero después de algunas horas recuperó su libertad. En un principio trascendió que el hombre habría intentado negar su relación con la mujer, algo que finalmente reconoció ante el juez.
En el marco de la investigación, tanto el marido de Paula como el supuesto amante fueron entrevistados por el gabinete psicológico de la Unidad Regional XVII, y las conclusiones de los profesionales obran en poder de la Justicia.
Por otra parte el hombre demorado en General Rodríguez, amigo de Gabriel, negó conocer el hecho, pero en su computadora quedaron registradas varias conversaciones en la que la mujer manifestó, hasta el día antes de su desaparición, problemas en su vida cotidiana.
La investigación la lleva delante el juzgado de Instrucción Nº 12 de San Lorenzo a cargo de Eduardo Fillocco. Para Alberto Perassi, padre de Paula, Gabriel sabe más de lo que dice: "Nosotros no sabíamos que mantenía una relación con mi hija, al principio le creía pero ya no le creo, para mí sabe mucho más de lo que dice y ahí hay que apuntar toda la investigación", reflexionó. Y agregó: "Tampoco sabíamos que Paula estaba embarazada, ella es parte del problema, pero Gabriel también".
El hombre se refirió al momento que vive la familia: "Estamos muy mal, como padre y como abuelo, viendo a dos criaturas a las que no sabemos qué decirles de su madre. Nosotros nos mantenemos juntos, con mi yerno con los chicos, esperando una respuesta que nunca llega y cada vez vemos más lejana".
La joven. Paula es de contextura delgada, mide 1,65 metro, tiene cutis blanco, ojos verdes, cabellos castaño claro (lo llevaba largo cuando desapareció) y tiene un tatuaje de una mariposa de colores en zona derecha del abdomen.
Al momento de su desaparición vestía jeans azules, un chaleco inflable negro, una campera negra con tres tiras doradas en el pecho del lado izquierdo, zapatillas blancas Adidas, una bandolera de cuero negra y aros de oro con la letra "P".
Se pide a la comunidad que en caso de poder aportar datos sobre su paradero se llame al Juzgado de Instrucción de San Lorenzo (03476 420032), a la Comisaría. 1º de San Lorenzo (03476 422408), o a la Agrupación de Unidades Especiales (03476 422126).
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