También queremos una educación no sexista
Desde el año 1989, cada 21 de junio, se celebra el “Día de la educación no sexista”. Esta fecha fue instaurada por la Red de Educación Popular Entre Mujeres (REPEM) en una reunión celebrada en Paraguay.
Desde aquellos tiempos, y con actual vigencia por estos días, se pretende promover el derecho a una educación democrática, libre de estereotipos y en base a la revisión de los patrones socioculturales. Todo esto persiguiendo el desarrollo de nuevas actitudes y habilidades para una convivencia más justa, humana e igualitaria, con profundo respeto a la diversidad.
Años más tarde de la reunión en Paraguay, pero en Baijing, se celebra la “IV Conferencia Mundial sobre la Mujer” donde La Plataforma sobre Educación exige: asegurar la igualdad de acceso a la educación para las mujeres de todas las edades; erradicar el analfabetismo, asegurando el acceso universal de las niñas a la enseñanza primaria y secundaria antes del año 2015; aumentar el acceso de las mujeres a la formación profesional y crear programas educativos para mujeres desempleadas; velar para que las instituciones educacionales respeten los derechos de las mujeres y niñas a la libertad de conciencia y religión; promover una educación no discriminatoria, eliminando todo y cualquier dispositivo legal que establezca diferencias por cualquier forma de discriminación; elaborar currículos y libros didácticos libres de estereotipos para todos los niveles de enseñanza, incluyendo la formación de personal docente.
La educación no sexista, conocida en otros países como coeducación, es un proceso de cambio de actitudes y de enfoque en la enseñanza dirigido a toda la comunidad educativa con la finalidad de lograr el desarrollo integral de ambos sexos para alcanzar una verdadera igualdad, en oportunidades y derechos.
Si prestamos atención, los rasgos sexistas aparecen en nuestra educación de múltiples formas: en el lenguaje, en las relaciones de autoridad, en las relaciones entre iguales, en las expectativas de rendimiento o en los resultados académicos; también se pueden ver en los aspectos académicos e incluso en los que tienen que ver con la formación ética y los esquemas de pensamiento aprehendidos. Todos estos motivos son más que suficientes para repensar la educación que queremos.
En Santa Fe estamos iniciando un proceso histórico: por primera vez estamos comenzando a discutir una “Ley de Educación” para nuestra provincia. Es sin dudas la oportunidad para pensar en la mejor educación del país, donde también tengamos en cuenta lo que esta fecha nos exige.
Es por todo esto que tenemos un mensaje claro: es nuestra obligación trazar el camino hacia una educación democrática, respetuosa de la diversidad social, sexual, cultural, étnica, racial y etaria. Educación que cuestione estereotipos y revierta prácticas discriminatorias, sea en los ámbitos públicos o privados. Y esa traza no será sino con el apoyo, las opiniones y las recomendaciones de cada una y cada uno de quienes integran el ámbito educativo: docentes, directivos, especialistas en educación, padres y madres, estudiantes y funcionarios. Queremos una educación no sexista.
En 2008, el Gobierno del Frente Progresista Cívico y Social puso en marcha el Programa de Educación Sexual Integral, el cual ha sido profundizado, ampliado y fortalecido en los últimos años, dando cuenta del gran compromiso con el que el mismo fue impulsado desde la gestión provincial.
En este sentido, el Ministerio de Educación de Santa Fe desarrolla diferentes líneas de trabajo e instancias de formación y acción en ESI. Su implementación se concreta de modo progresivo y se destina a los diferentes agentes institucionales del sistema educativo, en todos sus niveles y modalidades, y en los cinco nodos de la provincia, haciendo foco en dos aspectos complejos: el carácter integral y transversal de los contenidos la ESI y el rol docente y la escuela.
Proyecto de Ley
Hace unos pocos días presentamos en la Cámara de Diputados un proyecto de Ley para crear un Programa Provincial de Educación Sexual Integral, (ESI) para todo el territorio provincial.
Argentina cuenta, desde la sanción de la Ley 26.150 del año 2006, con un Programa Nacional, que define los Lineamientos Curriculares de Educación Sexual Integral (ESI), para enseñar educación sexual a niños, niñas y jóvenes de todos los establecimientos estatales de educación pública o privada, contemplando los niveles de educación inicial hasta la formación docente.
Estamos convencidos que temas como este deben tener el debate necesario entendiendo los tiempos que corren y haciendo uso de la enorme cantidad de material y herramientas que tenemos para abordarlo. Este proyecto de ley es solo uno de los proyectos que tenemos pensados para Santa Fe, que va camino hacia la educación que queremos.
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