Unión desaprovechó la chance de asegurarse la localía en la Liguilla Pre-Sudamericana, al igualar anoche 0-0 con San Martín de San Juan, en un duelo chato y carente de emociones. En la próxima fecha visitará a Estudiantes a la espera para saber cuál será su cruce.
Foto: M. Testi
En el estadio 15 de Abril, Unión igualó sin goles ante San Martín de San Juan, en la continuidad de la 29ª fecha de Primera División y se quedó con las ganas de asegurarse la localía de cara a la Liguilla Pre-Sudamericana. El Tatengue llegó a los siete encuentros sin perder, en tanto los cuyanos, que arrastran seis sin alegrías, aún no aseguraron su ingreso a la mencionada instancia. En la próxima fecha, el elenco de Leonardo Madelón visitará a Estudiantes.
Aunque en los primeros minutos fue Unión el que tomó la iniciativa, sólo fueron intenciones buscando sobre todo la velocidad de Ignacio Malcorra por la izquierda o las corridas de Lucas Gamba, pero esos intentos no fueron realizados con claridad. Además, porque los volantes visitantes, como por ejemplo Nicolás Pelaitay y Sebastián Navarro, se encargaron de trabar el encuentro en una zona clave como es la central.
Aunque por intenciones, fueron los Tatengues los que cada vez que Diego Villar y Malcorra llevaron el equipo adelante generaron aproximaciones, pero no peligro concreto sobre el arco de Luis Ardente. Recién a los 19’ y, con un desborde de Gamba por la derecha, hizo zozobrar al fondo visitante, pero Claudio Riaño no conectó bien de espaldas al arco rival.
En contrapartida y, a pesar que Unión fue el que propuso, San Martín de San Juan comenzó a ganar terreno. Desde los 22’, sobre todo con las incursiones de Eric Aparicio, que tuvo un tiro de media distancia que se fue cerca del segundo palo de Matías Castro. Tres minutos más tarde el elenco cuyano no solo ya había dividido el trámite sino que también manejaba con mayor orden y claridad la pelota.
A tal punto preocupó el bajo rendimiento colectivo del dueño de casa que, exactamente a los 30’, Leonardo Madelón llamó desde el banco de relevos a Mauricio Martínez para darle indicaciones precisas, ya que era evidente que el juego en campo no convencía en ningún aspecto.
Recién a los 37’, el Rojiblanco llegó con peligro concreto. Primero luego del robo de Gamba por la izquierda; la pelota corrió, llegó a Malcorra y su tiro cruzado pasó cerca del ángulo superior derecho del arquero contrario. Más allá de haber sido una buena llegada de los locales, también demostró en el minuto que fue la llegada de lo escaso que llegó la formación a terreno defensivo Verdinegro.
Así se cumplieron los primeros 45’ de juego en la Avenida, donde más allá de las intenciones ofensivas que tuvo la formación que conduce Leonardo Madelón, quedó nuevamente en evidencia que no se observó un buen cotejo en líneas generales, pero por sobre todas las cosas, el buen espectáculo brilló por su ausencia. Nuevamente Unión careció del suficiente poderío en los metros finales como para complicar a un ordenando fondo sanjuanino. Otra vez la cara del Tate en la primera etapa no fue de las mejores.
Más de lo mismo
El comienzo de la etapa final arrancó de la misma manera que el primer tiempo para los Tatengues. Es decir, mostrando una imagen preocupante desde el aspecto futbolístico, porque siguió sin encontrarle la vuelta a un trámite opaco y deslucido.
Pero después de los primeros 5’ las cosas fueron cambiando para los locales, porque comenzaron a tomar las riendas de la noche de la mano de un Villar y Malcorra muy activos, sumándose la velocidad de Gamba para inquietar a la defensa. La formación presionó más arriba generando grietas en los dirigidos por Carlos Mayor.
Ese ahogo provocó la primera falla con un pifia de Renzo Vera, que deparó en Gamba, pero su tiro cruzado fue tapado por el golero contrario Luis Ardente; el cotejo se hizo de ida y vuelta también porque el rival tuvo algunos avances que fueron bien resueltos por el bloque defensivo local. Pero Eric Aparicio y la movilidad de Carlos Bueno mostraron que el contrario esperaba atento para jugar rápido de contragolpe.
Pasados los 20’, Madelón realizó dos cambios: el primero fue el ingreso de Franco Soldano por Gamba, sorpresivo porque se dio en el momento en donde el mendocino estaba generando peligro con su velocidad; y la segunda carta fue ofensiva, porque el DT colocó a Juan Gabriel Rivas por Martínez, quedando Sánchez como único volante central. Pero más allá de las modificaciones, ya Unión era superior a San Martín y casi lo justifica a los 26’, aunque el taco perfecto de Riaño exigió en forma estupenda al arquero rival, ya que anticipó al atacante Tatengue cuando la acción tenía destino de red.
Y a los 32’, la definición exquisita de Rivas pegó en el travesaño de un Ardente que estaba vencido. A esa altura del encuentro y, por méritos propios, el Rojiblanco merecía algo más que el empate; porque con un poco que mejoró en el complemento sirvió para cambiar la pálida imagen que había evidenciado en el primer tiempo.
Aunque otra vez le faltó peso y potencia en los metros finales como para vulnerar al elenco sanjuanino. No hubo tiempo para más, el siempre irritante árbitro Juan Pablo Pompei marcó el pitazo final y otra vez el equipo Rojiblanco no pudo volver a cantar victoria en su casa: un 0-0 que le queda pintado por lo propuesto por dos equipos que lejos estuvieron de mostrar su mejor versión.
Por el momento, Unión estaría jugando el cruce de la Liguilla Pre-Sudamericana como local, aunque este empate puso en jaque dicha condición, porque dependiendo los resultados de hoy eso puede cambiar. Ahora será momento de visitar a Estudiantes con la premisa de seguir sumando en pos de que el sueño esté cada vez más cerca.
Claudio Caplan / Suplemento Ovación
Foto: Manuel Testi
Foto: Manuel Testi
No hay comentarios:
Publicar un comentario