Un grupo de personas demarcó con postes y alambres un terreno privado. El municipio está investigando quién es el titular, ya que existe una transferencia que podría ser irregular y una importante deuda por tasas atrasadas.
De la Redacción de El Litoral
“Entraron como hormigas”. Eso dijo una vecina de La Loma, una barriada de San José del Rincón, para contar cómo un grupo de desconocidos ocupó de manera ilegal terrenos privados. Los lotes abarcan tres mitades de manzana -ubicadas sobre calle Padre Alvarado entre calle Seguí, Constituyentes y Busaniche- fueron usurpados el pasado primero de mayo mediante una demarcación —improvisada pero prolija— con alambres y postes. Incluso, una pequeña casa que está dentro de uno de los terrenos también fue tomada, aparentemente por una mujer joven y niños.
En el barrio, circulan dos versiones sobre quiénes serían los ocupantes de los amplios lotes, una situación que preocupa a las autoridades municipales. Por un lado, algunos vecinos afirman que son personas provenientes de Santa Fe y también de Rincón, mientras que otros sostienen que los propietarios de los terrenos lindantes sencillamente, expandieron sus propiedades.
“Esta parte nunca estuvo alambrada, hace más de 20 años que está así. El día que entraron trabajaron desde temprano y dejaron todo como se ve, hasta el momento no hubo más movimiento”, explicó Teresa, que vive enfrente de los terrenos cercados.
Mientras EL Litoral recorría la zona, un hombre que dijo llamarse Alejandro se acercó “para aclarar cómo fueron las cosas”, aunque brindó una versión un tanto contradictoria. Según indicó, no conoce a ninguno de “los ocupas” pero afirmó que efectivamente son los propietarios de los terrenos lindantes que avanzaron sobre los desocupados. “Es gente buena que hizo eso porque estaba deshabitado, agrandaron sus terrenos”, precisó, intentando restarle importancia al hecho. Incluso, enfatizó en que “supuestamente” los lotes tienen dueño pero nunca apareció por la zona. “Como los vecinos siempre cortaron los pastos y ante el rumor de que podría venir gente de otro lugar, decidieron cerrarlos”, comentó Alejandro.
Respecto de la titularidad de los terrenos, también hay dos situaciones que están siendo investigadas por la Municipalidad, ya que podrían constituir un ilícito. Según explicó Sergio Trevisani, secretario de Servicios, Obras Públicas y Recursos Hídricos de Rincón, en los registros catastrales figura una persona como propietaria de los terrenos; sin embargo, tras la usurpación, se presentó otra afirmando que era el propietario. Pero el segundo sujeto aún no acreditó debidamente la titularidad de los inmuebles.
A su vez, existe una deuda con el fisco rinconero de aproximadamente 20 mil pesos por impuestos atrasados de esos terrenos. “Ante ese marco, estamos investigando si no hubo fraude porque en 2012 aparentemente cambia la titularidad pero la deuda persiste. Es sabido que para la transferencia legal es necesario contar con el libre deuda tanto con la Municipalidad y la provincia”, señaló Trevisani, y remarcó que “si la compra fue legal, esa deuda debería estar saldada”. El funcionario además apuntó a que si la transferencia es ilegal, hubo profesionales que avalaron ese hecho.
“El tema de la usurpación en sí es una cuestión entre un privado y la Justicia. El resto es necesario aclararlo porque la Municipalidad está siendo perjudicada al haber deuda”, remarcó Trevisani. Las definiciones sobre el caso llegarían en los próximos días, cuando se logre obtener un panorama certero de la situación. Una tarea nada sencilla ya que, según dijo el secretario de Obras Públicas, el sistema informático con el que cuenta la Municipalidad es “muy precario”.
En sesión
El caso se conoció la semana pasada, tras la aprobación en la última sesión del Concejo Municipal de un pedido de informe, autoría del edil Raúl Rivas del Frente para la Victoria. “Más allá de la situación del terreno en particular, es una ocupación ilegal y por la fuerza”, mencionó Rivas.
En el Concejo, se solicitó conocer: si tomaron algún tipo de medidas administrativas por la irregular demarcación de los lotes; si se ha hecho alguna denuncia o constancia policial. Otro de los puntos, el más llamativo posiblemente, tiene que ver con la sospecha de que la ocupación haya sido promovida por terceros. En ese sentido, el pedido de informe incluye detalles al respecto.
“Creemos que no es justo que los vecinos de la zona, que con tanto esfuerzo planificaron y construyeron su vida y la de sus familias, se encuentren amenazados por la presencia de personas de las cuales ignoran sus intenciones y procedencia”, explicó Rivas en los fundamentos del pedido de informe. Y añadió que si el Ejecutivo inició acciones concretas al respecto y tiene resultados “los dé a conocer para llevar de esta forma tranquilidad a la población de la zona, ya que abundan versiones que provocan congoja e incertidumbre”.
“Entraron como hormigas”. Eso dijo una vecina de La Loma, una barriada de San José del Rincón, para contar cómo un grupo de desconocidos ocupó de manera ilegal terrenos privados. Los lotes abarcan tres mitades de manzana -ubicadas sobre calle Padre Alvarado entre calle Seguí, Constituyentes y Busaniche- fueron usurpados el pasado primero de mayo mediante una demarcación —improvisada pero prolija— con alambres y postes. Incluso, una pequeña casa que está dentro de uno de los terrenos también fue tomada, aparentemente por una mujer joven y niños.
En el barrio, circulan dos versiones sobre quiénes serían los ocupantes de los amplios lotes, una situación que preocupa a las autoridades municipales. Por un lado, algunos vecinos afirman que son personas provenientes de Santa Fe y también de Rincón, mientras que otros sostienen que los propietarios de los terrenos lindantes sencillamente, expandieron sus propiedades.
“Esta parte nunca estuvo alambrada, hace más de 20 años que está así. El día que entraron trabajaron desde temprano y dejaron todo como se ve, hasta el momento no hubo más movimiento”, explicó Teresa, que vive enfrente de los terrenos cercados.
Mientras EL Litoral recorría la zona, un hombre que dijo llamarse Alejandro se acercó “para aclarar cómo fueron las cosas”, aunque brindó una versión un tanto contradictoria. Según indicó, no conoce a ninguno de “los ocupas” pero afirmó que efectivamente son los propietarios de los terrenos lindantes que avanzaron sobre los desocupados. “Es gente buena que hizo eso porque estaba deshabitado, agrandaron sus terrenos”, precisó, intentando restarle importancia al hecho. Incluso, enfatizó en que “supuestamente” los lotes tienen dueño pero nunca apareció por la zona. “Como los vecinos siempre cortaron los pastos y ante el rumor de que podría venir gente de otro lugar, decidieron cerrarlos”, comentó Alejandro.
Respecto de la titularidad de los terrenos, también hay dos situaciones que están siendo investigadas por la Municipalidad, ya que podrían constituir un ilícito. Según explicó Sergio Trevisani, secretario de Servicios, Obras Públicas y Recursos Hídricos de Rincón, en los registros catastrales figura una persona como propietaria de los terrenos; sin embargo, tras la usurpación, se presentó otra afirmando que era el propietario. Pero el segundo sujeto aún no acreditó debidamente la titularidad de los inmuebles.
A su vez, existe una deuda con el fisco rinconero de aproximadamente 20 mil pesos por impuestos atrasados de esos terrenos. “Ante ese marco, estamos investigando si no hubo fraude porque en 2012 aparentemente cambia la titularidad pero la deuda persiste. Es sabido que para la transferencia legal es necesario contar con el libre deuda tanto con la Municipalidad y la provincia”, señaló Trevisani, y remarcó que “si la compra fue legal, esa deuda debería estar saldada”. El funcionario además apuntó a que si la transferencia es ilegal, hubo profesionales que avalaron ese hecho.
“El tema de la usurpación en sí es una cuestión entre un privado y la Justicia. El resto es necesario aclararlo porque la Municipalidad está siendo perjudicada al haber deuda”, remarcó Trevisani. Las definiciones sobre el caso llegarían en los próximos días, cuando se logre obtener un panorama certero de la situación. Una tarea nada sencilla ya que, según dijo el secretario de Obras Públicas, el sistema informático con el que cuenta la Municipalidad es “muy precario”.
En sesión
El caso se conoció la semana pasada, tras la aprobación en la última sesión del Concejo Municipal de un pedido de informe, autoría del edil Raúl Rivas del Frente para la Victoria. “Más allá de la situación del terreno en particular, es una ocupación ilegal y por la fuerza”, mencionó Rivas.
En el Concejo, se solicitó conocer: si tomaron algún tipo de medidas administrativas por la irregular demarcación de los lotes; si se ha hecho alguna denuncia o constancia policial. Otro de los puntos, el más llamativo posiblemente, tiene que ver con la sospecha de que la ocupación haya sido promovida por terceros. En ese sentido, el pedido de informe incluye detalles al respecto.
“Creemos que no es justo que los vecinos de la zona, que con tanto esfuerzo planificaron y construyeron su vida y la de sus familias, se encuentren amenazados por la presencia de personas de las cuales ignoran sus intenciones y procedencia”, explicó Rivas en los fundamentos del pedido de informe. Y añadió que si el Ejecutivo inició acciones concretas al respecto y tiene resultados “los dé a conocer para llevar de esta forma tranquilidad a la población de la zona, ya que abundan versiones que provocan congoja e incertidumbre”.
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