Norma Castaño lucha desde hace una década contra la venta de drogas en Santa Fe y habló sobre el tema. “Él nos usaba a las madres para que le demos información sobre los vendedores”, agregó Castaño.
Norma Castaño, titular de la Asociación de Madres Solidarias (entidad que asesora a las mamás que tienen hijos con problemas de adicción), denuncia desde hace años situaciones de connivencia entre agentes policiales santafesinos y narcotraficantes.
Ayer, tras conocer la noticia acerca de la renuncia del jefe de Policía Hugo Tognoli manifestó en primer lugar: “Es una sensación rara que tengo, porque lamento que seamos tapas de diarios nacionales por esta noticia, donde un jefe policial está involucrado con el narcotráfico. Para la provincia, esto no está bien”.
En el mismo sentido, indicó: “En lo personal, estoy contenta porque esto yo lo venía diciendo hace mucho tiempo. En 2010, yo ya tenía denuncias en la Justicia en contra de este señor (por Hugo Tognoli), porque él nos usaba las madres para que le demos información sobre los vendedores (de drogas) para después ir y cobrarles una cuota. Después vine denunciando todos los arreglos que él tenía, desde 2010”.
Norma Castaño asegura que a todos los funcionarios envió documentación en la cual apuntaba a Tognoli: “En su momento, le mandé carta al gobernador Hermes Binner, explicándole todas las denuncias que estábamos haciendo. Nunca tuvimos una respuesta. A cada ministro que asumió le mandé carta. Cuando él asumió como jefe de la Policía, para nosotros fue terrible. El mismo día que asumió le entregué a Leandro Corti, quien era el ministro de Seguridad, la carpeta con todas las denuncias. Yo les dije «éste es el jefe de Policía que van a poner»”.
Más denuncias
“No nos extraña nada, porque lo vivimos en carne propia. Nosotras íbamos a llevarle información sin saber que le estábamos dando en bandeja los datos para que él negociara con los narcos. Incluso hubo una circular en su momento en la cual él ordenaba que cuando fueran a realizar allanamientos primero le avisaran a él. Así estaban trabajando los comisarios que muchas veces se encontraban con droga y tenían que mirar para otro lado”, relató ayer Castaño, quien inició su lucha hace más de una década.
Con una expresión de deseo, también se dirigió a Antonio Bonfatti: “Yo le pido al gobernador que realmente tome cartas en el asunto y que de una vez por todas esto se termine. Yo le mandé una carta diciéndole que ya había ido a Asuntos Internos y a la Justicia y le preguntaba dónde más tenía que ir. Esto no se termina en el señor Tognoli. En Drogas Peligrosas hay buenas personas y policías que quieren trabajar, pero también es cierto, y sobre esto también tengo las denuncias hechas, que se compran los lugares de jefe”.
—¿Hay otras personas denunciadas por usted, además de Tognoli?
—Hay varios denunciados. Le mandé carta al ministro también acerca del personal que se tiene que ir. El jefe de Inteligencia se tiene que ir porque compró su puesto por 50 mil pesos. Entonces eso se tiene que terminar, porque acá en la institución yo todos los días recibo a madres desesperadas porque sus hijos se están destruyendo por la droga, y recibo también a madres cuyos hijos se mataron por no poder dejar la droga.
Represalias
“Eso se tiene que terminar, porque estamos hablando de la droga. La droga destruye familias enteras, a la juventud, a los chicos. Ellos mandan a sus chicos a escuelas privadas y andan en 0KM a costa de la vida de nuestros chicos y de las familias que destruyen”, lamentó la titular de Madres Solidarias.
En cuanto al jefe de Policía, Castaño relató: “Yo volví a tener contacto con él una sola vez hace poco tiempo y me dijo textualmente «Ahora las cartas las tengo yo». Después me mandó a decir con otra gente que si no me callaba se iba a perjudicar mi marido, que trabaja en la Policía”.
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