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viernes, 25 de diciembre de 2015

Santa Fe Reconoció el hecho Quemacoches en libertad


El “Cachorro” Roberto Acosta es un conocido puntero político de la ciudad vinculado al movimiento de desocupados. Foto: Archivo El Litoral
De la Redacción de El Litoral

El juez de la IPP Héctor Candioti dejó hoy en libertad al hombre que estaba detenido por los daños ocasionados al utilitario Citröen Berlingo que utilizaba el secretario de Control Municipal, Ramiro Dall’Aglio. Roberto “Cachorro” Acosta, considerado un puntero político embanderado con el movimiento de desocupados, asumió su responsabilidad ante los hechos atribuidos por el fiscal Estanislao Giavedoni, y adelantó que optará por la vía del juicio abreviado.

En el comienzo de la audiencia, el fiscal desplegó las evidencias con las que contaba para incriminar a Acosta, tanto en el atentado contra el vehículo oficial, ocurrido en las primeras horas de la madrugada del 30 de octubre, a pocos metros del cuartel de bomberos en Tucumán al 2800; así como de la portación de un arma de fuego que le fue secuestrada ayer cuando fue detenido en inmediaciones de calle San José al 6900.

Acosta, de 49 años, reconoció la autoría de ambos delitos, asesorado por el defensor público oficial Leandro Miró, a los fines de acceder a la instancia del juicio abreviado. A su vez, el imputado formuló dos graves acusaciones sobre hechos delictivos que le habrían encargado desde cierto sector político de la ciudad, por lo que el fiscal tomó nota del relato y abrió dos nuevas instancias investigativas para conocer si dichas afirmaciones resultan ciertas.

A propósito de un futuro acuerdo de juicio abreviado, se estima que la pena que le podría caber por el más grave de los delitos atribuidos será de “un año de cumplimiento en suspenso, que es el mínimo legal que permite el tipo penal” para una persona sin antecedentes condenatorios, indicó una fuente del caso.

Antes de decretar su libertad, el juez Candioti impuso al detenido de dos medidas de distancia que implican no poder acercarse a menos de 500 metros del palacio municipal, ni al domicilio del funcionario que resultó víctima del atentado.

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