La jefa del Estado volvió a utilizar la cadena nacional para cuestionar a la oposición y se mostró junto al candidato Daniel Scioli. “Quieren imponer el desánimo”, manifestó Cristina.
Él y ella. Scioli y Cristina mostraron en público buena sintonía, pese a los rumores sobre un enojo presidencial.
La presidenta Cristina Kirchner acusó ayer a la oposición de querer “poner en duda el sistema democrático” y resaltó la “unidad” del oficialismo, durante un acto en el que se mostró con el candidato presidencial Daniel Scioli.
El discurso de la mandataria, transmitido por cadena nacional, fue durante la inauguración de la estación Ciudad Universitaria del Belgrano Norte, donde se mostró también con el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, tras la tensión que se vivió en el cierre de listas, cuando quedó relegado de la carrera presidencial.
“A los que agravien, descalifiquen, quieran instalar el desánimo, quieran poner en duda el sistema democrático, dejémosle esa tarea para ellos. Nosotros cada vez que hablemos, tomemos un micrófono, miremos una cámara de televisión sea para anunciar lo que hemos hecho y lo que vamos a seguir haciendo”, expresó la presidenta.
De esta manera, hizo alusión al acercamiento de los candidatos opositores a la Presidencia Mauricio Macri (Cambiemos), Sergio Massa (UNA) y Margarita Stolbizer (Progresistas), quienes el pasado miércoles se juntaron para reclamar una reforma en el sistema electoral.
“Acá nos ven reunidos, no para criticar, no para amargarle la vida a la gente con mala onda, no para instalarle el desánimo o para criticar a otros, nos juntamos para cosas como estas, para hacer cosas por la gente, mejorarle la calidad de vida”, resaltó Cristina Kirchner.
En su discurso, la mandataria destacó en dos oportunidades el hecho de estar todos “reunidos”, como si tratara de enviar un mensaje de unidad a todo el espacio oficialista, donde la campaña electoral comienza a dejar al descubierto algunas diferencias entre distintos sectores.
Además, la idea cobró fuerza con la presencia de Randazzo, cuya relación con la presidenta quedó resentida tras haber rechazado la oferta de ser candidato a gobernador bonaerense cuando se decidió que Carlos Zannini, mano derecha de la jefa de Estado, acompañara a Scioli en la fórmula.
En el acto también estuvieron presentes el jefe de Gabinete y candidato a gobernador bonaerense, Aníbal Fernández; el ministro de Economía y postulante a diputado nacional por la ciudad de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el secretario general de la Presidencia y aspirante a diputado por la provincia de Buenos Aires, Eduardo Wado De Pedro.
La presidenta dejó inaugurada una nueva parada de trenes que beneficiará a los estudiantes de la UBA, que tenían que caminar unos 700 metros desde los pabellones universitarios a la estación Raúl Scalabrini Ortiz, la más cercana. La nueva estación está comunicada directamente con el predio de la universidad a través de un puente peatonal, y tiene otra salida hacia el estadio de River Plate.
Además, dialogó por videoconferencia con el gobernador de San Juan, José Luis Gioja, quien inauguró junto al ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, las obras del dique Punta Negra.
Luego, también por videoconferencia, se comunicó con el distrito bonaerense de Esteban Echeverría, donde se inauguró un paso bajo nivel en la ciudad de Monte Grande, y charló con el intendente local, Fernando Gray. Por último, en comunicación con la localidad de Los Cardales, en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, encabezó la inauguración de la planta Los Cardales, de la empresa Premoldeados de Argentina.
La estación Ciudad Universitaria es la primera construida en el área metropolitana en 30 años. La mandataria precisó que además el servicio del Belgrano Norte se verá reforzado por la compra de 20 equipos nuevos hechos íntegramente en la Argentina, con una inversión de más de 500 millones de pesos. En tanto, la construcción del puente de acceso y otras dependencias de la estación costó 108 millones de pesos, según explicó.
La presencia de Scioli en el acto y el dialogo casi constante que mantuvo con la presidenta, parecen desmentir las noticias que hablaban de un supuesto malestar de Cristina con el candidato.
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