Santa Fe espera $500 millones de Nación para obras eléctricas

Es la cifra que la provincia podría llegar a licitar durante 2014 y que el Estado argentino tendría que compensar para cumplir con el Programa de Convergencia de Tarifas que se firmó en junio pasado.

Diario UNO | 

E n junio de este año la provincia firmó con Nación el Programa de Convergencia de Tarifas Eléctricas, a partir del cual Santa Fe se comprometió a no aumentar el precio de la luz durante 2014 y la Casa Rosada a cubrir la infraestructura energética que se licite. Casi cinco meses después, el acuerdo se cumple aunque no con la celeridad que las autoridades locales quisieran.

En diálogo con Diario UNO, el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio, informó que “hasta la fecha se rindieron 239 millones de pesos y solo se recibieron 101,7 millones de pesos”. Significa que la provincia licitó distintas obras para la red eléctrica por la primera de esas sumas y desde la Nación enviaron algo menos de la mitad de dichos recursos.

“La semana que viene vamos a rendir otros 89 millones de pesos, con lo cual ya tendríamos 328 millones de pesos licitados”, indicó el funcionario. La demora preocupa, pero también advirtió que el cambio de mando en la Secretaría de Energía de la Nación ayudó a trabajar con un mayor grado de fluidez. En julio, Daniel Cameron dejó su lugar luego de 11 años para que asuma Mariana Matranga.

“Los problemas que tuvimos al principio, donde no pagaban las rendiciones que mandábamos, se fueron achicando; más aún, había gente que no conocía los procedimientos administrativos del Programa de Convergencia y eso demoró todo”, explicó Ciancio. A su vez, como el acuerdo es hasta el 31 de diciembre, cree que “a este ritmo se presentarán unos 500 millones de pesos en licitaciones”.

A esa cifra hay que sumar unos 250 millones de pesos que la provincia había invertido en la EPE antes de junio último, lo cual da entre “750 y 800 millones de pesos, que era la previsión que teníamos en 2014 para hacer obras, comprar equipamientos y otros equipos”. De todas formas, el convenio con la Nación no estipula un techo de inversión para Santa Fe, siempre y cuando la provincia cumpla con su parte: no tocar tarifas y mandar rendiciones.

—¿Qué balance hacen del Programa de Convergencia en estos cinco meses de aplicación?
—La verdad es que siempre estamos con la preocupación de qué es lo que vamos a hacer el día siguiente. No es fácil lograr los desembolsos porque eso no solo requiere de mandar la información y mandar los certificados (de obras), sino después, uno personalmente apoyar los trámites en Buenos Aires; acá siempre hay que estar con el teléfono en la mano.

El ministro también remarcó que el hecho de no haber aumentado tarifas durante 2014 en todo el país y que se quitaran subsidios en el servicio de gas natural motivó que “una enorme cantidad de personas se volcaran a utilizar la electricidad en lugar de gas. Eso pone a la Nación sobre una problemática de generación; de hecho tuvieron que comprar 500 megavatios a Uruguay para cubrir la mayor demanda”, dijo Ciancio.

“A nosotros nos pone en la problemática de qué hacer con el servicio en el sentido de cómo vamos a sostener un consumo tan elevado y, por otro lado, a qué costo”, evaluó el funcionario del Poder Ejecutivo. A su vez, señaló que no sabe si en 2015 la provincia aumentará tarifas o se extenderá el acuerdo de convergencia con la Nación y eso facilitará no cargar sobre los usuarios el plan de obras.

“Tal vez la Nación –continuó– defina seguir con la convergencia tarifaria. Por lo que hemos escuchado de los funcionarios nacionales de segunda y de tercer línea, están pensando en continuar con esta política durante el año que viene, pero no sé hasta dónde van a destinar recursos para este tipo de planes. Eso nos obliga a ver con atención lo que ocurra en los próximos dos meses para determinar cómo vamos a financiar nuestras obras en 2015”.

Además, el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente dijo que la provincia hoy lleva adelante su plan de inversión y eso es comprobable a partir de las rendiciones que hace a la Nación. De esa forma, criticó a aquellos dirigentes políticos de la oposición que denuncian “desinversión” en la Empresa Provincial de la Energía sin siquiera estudiar información pública y de fácil acceso.

Una Atucha por año
Es de recordar que para este año el gobierno de Santa Fe había previsto en unos 1.050 millones de pesos los recursos necesarios para afrontar las inversiones en la Empresa Provincial de la Energía –750 millones en obras y compra de materiales y otros 300 millones por los acuerdos salariales. La idea era financiarlo con el presupuesto vigente y una actualización de las tarifas.

Mientras se hacían los análisis de costos en abril y mayo pasado, apareció el Programa de Convergencia de Tarifas Eléctricas, que primero el Estado provincial no quiso firmar y después aceptó cuando se limaron algunos números. Hasta ese momento Santa Fe tenía la intención de aumentar entre el 20 y el 22 por ciento el precio de la luz, pero optó por no hacerlo en tanto y en cuanto la Nación se encargaría de financiar sus inversiones.

—¿Cuál es la situación de la EPE de cara al verano?
—Es evidente que hay una cantidad de factores que van confluyendo a que el sistema siempre esté acogotado, por decirlo de alguna manera, entre el consumo, la obsolescencia y las temperaturas que cada día son más feroces; a eso ahora también hay que sumarle el precio de la electricidad. En plena primavera tuvimos unos días de casi 50 grados de sensación térmica.

“Hay que imaginar que en la medida que avanzamos en aumentar la capacidad de distribución y de potencia de la electricidad, en función del mayor consumo, se nos ponen viejos los cables y entonces todo esto parece una sábana corta donde si tapás un lado se destapa el otro. Acá la clave es promover, desde la Nación, un uso responsable de la energía porque el ritmo de inversión que se necesita es impresionante y aumenta a pasos agigantados todos los años”, agregó.

Para Ciancio, en algún momento la Nación tendría que volver a analizar la aplicación de un programa que signifique incrementar el valor de las tarifas cuando el consumo de energía supere un umbral. Otro aspecto que mencionó es la necesidad de obligar a los usuarios a tener algunas conductas de uso responsable, como instar al uso de calefactores que no tengan piloto y la promoción de pantallas solares como energía alternativa. “La Nación debiera incentivar este tipo de cosas porque en el actual nivel de consumo la Argentina necesita construir una Atucha (central eléctrica) por año. Acá hay un problema de dinero pero también de posibilidades, imagínese que se está construyendo la central Brigadier López en Sauce Viejo que creo es de 800 megavatios –hoy genera unos 400 megavatios– y por año se necesitan entre 1.000 y 1.200 megavatios más”, finalizó.