ROSARIO: Sigue dormido un acuerdo entre la UNR y el Hogar del Huérfano

Hace casi un año la universidad pública y la institución habían firmado un convenio de cooperación. No hubo avances.

A poco menos de un año de que la Universidad Nacional de Rosario (UNR), la Fundación Nueva Generación Argentina (FNGA) y la Sociedad Damas de Protección al Huérfano firmaran un convenio por el cual las partes se comprometían a realizar un “intercambio de conocimientos, experiencias y recursos para la protección de la niñez desamparada”, entre otras acciones, aún no han habido avances al respecto.

Aunque el aporte de las diferentes áreas académicas a través de los programas de extensión universitaria –que la universidad pública ofrece en un amplio abanico de temáticas– sería de vasta utilidad para lograr avances en materia de inclusión, aprendizaje y adaptación de niños y adolescentes, aún no se han aunado criterios entre las partes que rubricaron el acuerdo, por lo que en la práctica éste aún no tuvo un correlato en la acción concreta. “El proceso de intervención está en stand by”, admitieron a El Ciudadano desde el Rectorado de la UNR.

Durante la rúbrica del convenio, el rector de la UNR, Darío Marorana, había expresado su interés por la implementación de “programas que tengan que ver con artes y oficios, violencia de género, en el marco de lo que es hoy repensar la protección de la niñez y de los jóvenes”. Incluso se entusiasmó con la posibilidad de extender los programas hacia las familias “a diferencia de lo que pasaba en el momento en que actuaba la Fundación, a la que había que dar cuenta de niños huérfanos que estaban directamente abandonados o cuyas familias no podían dar cuenta de ellos”.

Por su parte, la titular de la institución, Laura Borghi, explicó este diario que la Comisión de Damas de Beneficiencia, a la cual representa, llevó adelante acciones junto a la UNR por fuera del marco del acuerdo, las cuales estuvieron abocadas, en particular, a las “remodelaciones en el sector del edificio” donde funcionara el Hogar del Huérfano. Allí funciona hoy el Jardín de Infantes Integral Nº 1.005, el cual tiene su ingreso por Cerrito 751, con inscripción abierta a la comunidad.

Con todo, el 14 de mayo próximo se cumplirá un año de la firma del convenio que propone, según lo indica uno de sus puntos, “crear un modelo solidario que sea sustentable, perdurable y replicable para que su dinámica permita pasar de la filantropía a un paradigma de desarrollo social”. Todo indica que resta un complejo camino a recorrer para atender al postulado, pensado para dar nuevas chances a la institución que cerró sus puertas tras ser intervenida a mediados de 2011 por denuncias de abusos sexuales a niños, y reabrió el año pasado con un nuevo perfil acorde a las necesidades actuales, y lejos de la atención a hijos no reconocidos y abandonados, fenómeno de principios de siglo pasado en la ciudad.