Las jóvenes eran traídas desde la capital provincial al sur santafesino bajo un duro régimen de trabajo. Hay cuatro detenidos: dos mujeres, un remisero y un policía que "liberaba" la zona.
La Capital |
Tras la resolución, que data del 18 de junio, el Juzgado Federal Nº 1, a cargo del juez Reynaldo Rodríguez, emitió órdenes de requisa de las personas sindicadas y de vehículos, allanamientos, detenciones e intervenciones telefónicas.
Así, se logró interceptar, el 24 de junio pasado, a un vehículo que transitaba por la Autopista Santa Fe Rosario, conducido por uno de los involucrados. En el auto secuestraron 30 preservativos y un papel con nombres de mujeres y a su costado montos en números, entre otros elementos.
Duro régimen. Durante la pesquisa, se desentrañó el duro régimen al que los captores sometían a las jóvenes: si la explotación sexual no llegaba a rendir ganancias para cubrir el pago del "pasaje", ellas eran trasladas a otro lugar "a voltear camiones" hasta que se produjera dinero suficiente. En cambio, si decidían "no trabajar" se les cobraba el día. En ese caso, si el aviso era hecho antes de las 17 debían abonar 30 pesos, de lo contrario, "el pasaje completo".
Seis víctimas de esta red fueron rescatadas y asistidas por el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento de víctimas de Trata de Personas, dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
La sede judicial interviniente recibió las declaraciones indagatorias de las cuatro personas detenidas. Se trata de Martín Oscar G., Mariela Alejandra S., Zunilda Guadalupe G. y Rodrigo Adán María D. (quienes se negaron a declarar), luego de lo cual se pronunció favorablemente en punto a la solicitud del dictado de auto de procesamiento formulado el 4 de este mes por este Ministerio Público Fiscal.
Testimonios. En su pedido, el fiscal valoró especialmente los testimonios brindados por las seis víctimas, a partir de los cuales dio por probado que Martín G. aparece como quien se encargaba de buscar y trasladar a las mujeres, diariamente, desde Santa Fe hasta Puerto General San Martín y San Lorenzo. Las mujeres captadas eran recibidas por Zunilda Guadalupe G. y, además, ella era quien coordinaba (con la colaboración de Mariela S.), su posterior traslado a los diversos puntos de explotación sexual.
Quien coordinaba los traslados de las mujeres hacia los puntos de explotación sexual era Mariela S. Muchas veces, ella las acompañaba durante el trayecto, y una vez allí les asignaba a cada una de un lugar, "una parada", al tiempo que recaudaba el dinero proveniente de la actividad al finalizar la jornada.
Por último, quien se encargaba de garantizar "la zona liberada" del territorio donde se concretaba la explotación sexual era Rodrigo Adán María D, quien recibía —según la investigación— una retribución económica en beneficio propio, valiéndose de su condición de empleado de la Comisaría 5º de Puerto General San Martín.
Mientras tanto, la Unidad Regional XVII de policía, con asiento en San Lorenzo, ordenó un sumario interno al policía implicado en esta red.
No hay comentarios:
Publicar un comentario