Una banda de hombres en moto atacó al personal de la firma Lorenzatto Maquinarias, el jueves por la tarde, en Frontera. Un empleado resultó herido.
Tres hombres en moto desembarcaron el jueves, en el predio de la empresa Lorenzatto Maquinarias, en Frontera, en busca de dinero y herramientas. Redujeron al personal e hirieron a uno de los empleados en una de sus piernas. Se llevaron herramientas de mano, celulares, cheques y el dinero de la caja.
El episodio delictivo ocurrió a las cinco y media de la tarde, en plena jornada laboral, en un predio ubicado sobre la Ruta Nacional Nº 19 -Km 124-, en las afueras de la ciudad de Frontera, en el límite del departamento Castellanos con la provincia de Córdoba.
Según mostraron las cámaras de seguridad, apenas diez minutos bastaron para que los bandidos bajaran de sus motos empuñando armas cortas y amenazaran a los 5 empleados de la empresa y dos operarios de una casa de alarmas que casualmente se encontraban en el lugar.
Con los rostros cubiertos con bufandas, pasamontañas y cascos “entraron en las oficinas, redujeron a la secretaria y después fueron a la parte del taller donde hicieron lo mismo con los empleados”, relató esta mañana el responsable del Área de Ventas, Néstor Forlín.
Fuera de peligro
“Buscaban dinero” y “tuvieron un forcejeo con uno de los encargados”, al que “encerraron en el baño con la secretaria”, dijo. Pero al detectar que éste intentaba comunicarse con su celular para pedir auxilio, uno de ellos rompió la puerta, lo golpeó con el arma en la cabeza y luego descerrajó dos disparos que impactaron en la pierna izquierda del encargado de Servicios y Repuestos, Diego Moriondo.
La víctima, de 41 años, debió ser asistida por los servicios médicos y afortunadamente “se está recuperando bien”, contó su compañero.
Mientras esto ocurría, el resto del personal se encontraba en el taller, vigilado por otro de los delincuentes que los obligó a tirarse al suelo, mientras los apuntaba.
Como no encontraron el jugoso botín que imaginaban, en la huida se llevaron herramientas del taller, como taladros eléctricos, llaves de mano y alrededor de mil pesos de la caja, además algunos cheques cuyo monto no fue especificado.
Último disparo
“Nadie pudo ver las motos, salvo un cliente que cuando entraba al negocio ellos se están yendo”, recordó Forlín. Una vez más abrieron fuego acertando en el paragolpes de la camioneta del recién llegado.
Desde la empresa, se mostraron interesados en que este episodio tomara estado público, ya que “no es la primera vez” que son víctimas de asaltantes. “Hace 20 días, nos habían entrado de noche y se llevaron herramientas y computadoras”, sostuvo el entrevistado.
Si bien la zona donde se encuentra el local es de tránsito fluido, el vecino más cercano está a unos 2 km y la población dista 6 km del lugar.
Como resultado de lo ocurrido aquella tarde, la policía de la Comisaría 6ta. de Frontera labró un acta por “robo calificado por el empleo de arma de fuego, con privación de la libertad” y cuyo resultado además fue el de una persona con “heridas de arma de fuego”.
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