Dejar el auto en una playa, de 7 a 13, implica gastar, al menos, 65 pesos; mientras que hace siete años, ese mismo lapso costaba 7 pesos. Encontrar lugar en la vía pública un día hábil es una misión imposible e incluso en las playas de estacionamiento privadas es complicado conseguir lugar.
En la actualidad cuesta encontrar una plaza disponible para estacionar el auto en el microcentro. Encontrar lugar en la vía pública un día hábil es una misión imposible e incluso en las playas de estacionamiento privadas es complicado conseguir lugar. La elevada demanda tiene su correlato en los precios de la oferta, sobre todo en el ámbito privado.
En cuanto a los costos, quien tiene la posibilidad de optar por una dársena del servicio de estacionamiento medido municipal (Seom), en la vía pública, deberá desembolsillar 50 pesos si su intención es dejarlo de 7 a 13 –horario de la administración pública.
Si ese día la suerte no sonrió al conductor y lo empujó a una playa privada, el mismo podrá encontrarse con cierta disparidad en las tarifas, pero en el microcentro no tendrá chances de escapar, por esa misma cantidad de horas, de abonar alrededor de 65 pesos.
Desde hace escasos años, en la mayoría de los carteles ubicados en el ingreso a las playas, comenzaron a detallar el costo por media hora, con la aclaración de que no se fracciona. Enloquecería a cualquier calculador estimar las ganancias probables de un estacionamiento privado por hora y por días en estos tiempos.
Depende la cercanía a la Peatonal capitalina, la primera media hora se cotiza entre 9 y 10 pesos; la primera hora entre 15 y 18; y las subsiguientes, entre 9 y 10 pesos más. En las calles paralelas a San Martín un poco más alejadas, aún se consiguen a dos o tres pesos menos de diferencia.
Si se hace una comparación del crecimiento en los precios, la realidad asombra. En 2006, según registro fotográfico de Diario UNO, una hora de estacionamiento en la zona céntrica santafesina costaba dos pesos; y las subsiguientes, un peso; es decir que las seis horas costaban siete pesos en total. Por lo cual, en siete años, las tarifas de las playas privadas aumentaron, en promedio, entre 800 y 900 por ciento.
En la calle
En cuanto al Seom, se paga el monto exacto que corresponde al tiempo de estacionamiento utilizado. La tarifa durante la primera y segunda hora tiene un costo de 2,5 pesos cada una.
Para promover la rotación del estacionamiento, la tercera hora cuesta 7,5 pesos (es decir que el costo total asciende a 12,50); la cuarta, 10 pesos (acumulado, 22,50), la quinta, 12,50 pesos (acumulado, 35) y la sexta, 15 pesos (acumulado, 50).
Para promover la rotación del estacionamiento, la tercera hora cuesta 7,5 pesos (es decir que el costo total asciende a 12,50); la cuarta, 10 pesos (acumulado, 22,50), la quinta, 12,50 pesos (acumulado, 35) y la sexta, 15 pesos (acumulado, 50).
Nuevas playas
En marzo pasado se realizó la apertura de sobres de la licitación para la construcción de un complejo de cocheras subterráneas en la zona del Parque Alberdi, incorporando 295 plazas de estacionamiento en un medio nivel soterrado. La obra, que según los cálculos de la única oferente demandará una inversión estimada en 33 millones de pesos, incluye también la puesta en valor de la totalidad del Parque.
El pliego establece que la licitación se efectúa para la construcción y su posterior concesión para la explotación de un edificio de estacionamiento vehicular semi-soterrado en el terreno comprendido entre avenida Rivadavia, 27 de Febrero, Pasaje Falucho y calle Tucumán. También se detalla que el complejo se ejecutará para la guarda de automotores en forma transitoria, por lo que el concesionario cobrará al cliente un monto por la ocupación del espacio según el tiempo transcurrido.
El pliego establece que la licitación se efectúa para la construcción y su posterior concesión para la explotación de un edificio de estacionamiento vehicular semi-soterrado en el terreno comprendido entre avenida Rivadavia, 27 de Febrero, Pasaje Falucho y calle Tucumán. También se detalla que el complejo se ejecutará para la guarda de automotores en forma transitoria, por lo que el concesionario cobrará al cliente un monto por la ocupación del espacio según el tiempo transcurrido.
Además se aclara específicamente que la concesión no comprende el área al aire libre a nivel de parque, que seguirá siendo un espacio de uso público general. La intervención contempla una superficie de 7.280 m2 destinada a estacionamientos y 15.245 m2 destinados al Parque y sectores de espacios verdes parquizados.
En la actualidad hay otras cocheras de grandes dimensiones en construcción, tanto en la zona céntrica como a la vera de la avenida Alem y en terrenos portuarios, donde, por ejemplo, aparecen repletos a diario las dársenas gratuitas del shopping, casino y hotel; y del supermercado aledaño. En algunas aún buscan inversores para la explotación del servicio.
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