El hecho ocurrió en la zona de San Martín y Eva Perón este sábado. El chico herido fue trasladado al Alassia con un corte en el abdomen y en la espalda. Interviene la Subsecretaría de la Niñez.
ElLitoral |
Uno tiene 12 años y el otro 11. No saben de juguetes ni conocen el “calor del hogar”, porque la calle es “su hogar”. El mayor de ellos está armado con un cuchillo. Tristeza...
Ayer a la tarde ambos menores se encontraban en la zona de la peatonal San Martín y Eva Perón.
Nadie se percató de su presencia, porque ellos se mezclaron entre otros muchos chicos que disfrutaban de su manjar preferido. Ellos miraban...
En un momento dado estalló la discusión. La más feroz en su mundo. Algunos dicen que se pelearon por un teléfono celular.
En eso el mayor mete la mano en su bolsillo y saca una navaja que encontró vaya a saber dónde.
O lo que es peor, se la dio vaya a saber quién. No es para asustar. La chuza es verdadera y está dispuesto a usarla.
Puntazos
De pronto el más chico se toma la cintura y ve que hay sangre. También le duele la espalda.
El mayor le había asestado dos “puntazos”. Acto seguido comenzó a correr como lo hace siempre que el peligro le hincha las venas.
Algunos testigos ocasionales reaccionaron pidiendo auxilio. Mientras, el pequeño herido buscaba respuestas en el aire.
Los primeros en llegar al lugar fueron los agentes de la Brigada Motorizada. (“Esta vez no me van a llevar preso”, seguro que pensó).
Fueron los uniformados quienes pidieron una ambulancia. Poco después el menor era ingresado al Hospital de Niños Orlando Alassia.
Voceros confiables indicaron que las heridas no son de gravedad. No obstante se dispuso que quede internado para seguir de cerca su evolución.
Por lo ocurrido se le dio intervención a la Subsecretaría de Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia.
Ayer a la tarde ambos menores se encontraban en la zona de la peatonal San Martín y Eva Perón.
Nadie se percató de su presencia, porque ellos se mezclaron entre otros muchos chicos que disfrutaban de su manjar preferido. Ellos miraban...
En un momento dado estalló la discusión. La más feroz en su mundo. Algunos dicen que se pelearon por un teléfono celular.
En eso el mayor mete la mano en su bolsillo y saca una navaja que encontró vaya a saber dónde.
O lo que es peor, se la dio vaya a saber quién. No es para asustar. La chuza es verdadera y está dispuesto a usarla.
Puntazos
De pronto el más chico se toma la cintura y ve que hay sangre. También le duele la espalda.
El mayor le había asestado dos “puntazos”. Acto seguido comenzó a correr como lo hace siempre que el peligro le hincha las venas.
Algunos testigos ocasionales reaccionaron pidiendo auxilio. Mientras, el pequeño herido buscaba respuestas en el aire.
Los primeros en llegar al lugar fueron los agentes de la Brigada Motorizada. (“Esta vez no me van a llevar preso”, seguro que pensó).
Fueron los uniformados quienes pidieron una ambulancia. Poco después el menor era ingresado al Hospital de Niños Orlando Alassia.
Voceros confiables indicaron que las heridas no son de gravedad. No obstante se dispuso que quede internado para seguir de cerca su evolución.
Por lo ocurrido se le dio intervención a la Subsecretaría de Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia.
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