El responsable de la British Bankers Association (Bba) Anthony Browne, afirmó que la medida se tomará a principios de año, frente a los temores generados por la salida del país del bloque europeo.
/Télam |
"La mayoría de los bancos internacionales tienen ahora equipos que se ocupan de analizar qué medidas necesitan para seguir dando servicio a sus clientes", dijo Browne en un artículo publicado en el Observer, y agregó: "Muchos bancos pequeños planean iniciar el traslado antes de Navidad.
En los grandes se habla del primer trimestre del año que viene".
En la época del referéndum (en junio pasado), cuyo resultado se inclinó a favor del Brexit, gran parte de los bancos estuvo a favor de permanecer dentro de la Unión Europea, lo que ocurre ahora, advirtió Browne, es que "el debate público y político nos está llevando en la dirección errada".
La intención del gobierno de controlar la libertad de movimiento por parte de los extranjeros dentro del Reino Unido es visto por el sector como un duro golpe frente a cualquier posibilidad de mantener el "estatus" actual de los bancos en el país, aseguró Browne.
Los bancos británicos temen que en ese caso no puedan seguir vendiendo sus productos sin más dentro de la UE y a causa de ello se especula desde hace tiempo con la posibilidad de que trasladen parte de su sede europea a otros lugares, por ejemplo a Fráncfort.
Browne advirtió que un "Brexit duro" no tendrá solamente consecuencias en Reino Unido, sino también en la economía del resto de países de la Unión Europea.
"A todos nos perjudicará levantar barreras comerciales para los servicios financieros a ambos lados del Canal de la Mancha", concluyó.
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