A pocos días de festejarse el Día del Niño, los profesionales de la salud advierten que a la hora de comprar un juguete se debe tener en cuenta la edad de los chicos, para no sufrir accidentes provocados por un producto que no se adecúa a la edad del niño.
Télam |
La tendencia de los niños y niñas pequeños de desarmar y abrir juguetes, introduciendo pilas botón, rueditas o perlas de collares en la nariz, oídos y boca, provoca distintos trastornos y consecuencias, por lo que los especialistas advirtieron sobre la importancia de tomar medidas preventivas y recurrir a una guardia médica ante una emergencia .
En este sentido y en vísperas del Día del Niño, la especialista Bibiana Paoli, del equipo de profesionales del área de Otorrinolaringología Infantil (ORL) del Hospital de Clínicas, precisó que los casos más frecuentes y graves en la guardia de ese servicio tienen que ver con la manipulación de las pilas botón por parte de los chicos.
"Hay una gran cantidad de juguetes lumínicos y sonoros en el mercado actual que llevan pilas botón y que constituyen un gran riesgo, porque los chicos se las meten en la nariz o los oídos con bastante frecuencia, lo que puede producir complicaciones de salud severas, no solo por la obstrucción, sino por sus componentes químicos y eléctricos", enfatizó.
Destacó que si bien en el envoltorio de los juguetes están escritas las recomendaciones "eso no quiere decir que los padres las tengan en cuenta. Muchas veces el chico se encapricha, quiere un juguete y se lo compran aunque diga que no es recomendable para su edad", dijo en diálogo con Télam.
Con respecto a los juguetes que funcionan con las pilas botón, sucede muchas veces que no está el tornillo de seguridad para sostenerla; en esos casos se aconseja que se ajuste con algún adhesivo para que el niño no pueda sacarla.
Otro de los cuerpos extraños que los niños suelen llevarse a la boca o se las introducen en el oído o en la nariz son las perlitas de los kits para armar collares y pulseras y los juguetes para ensamblar que vienen con algunas golosinas.
Precisó que la tendencia a introducirse cuerpos extraños "es igual en varones y nenas" y que la edad en que suceden más este tipo de accidentes es entre los 3 y 5 años, aunque también se da en nenes de poco más de 1 año que se llevan a la boca perlitas cuando las encuentran tiradas en el suelo.
"También hay que fijarse en los peluches que tienen los ojitos o narices que son de goma o plástico y están pegados; eso tiene que estar bien adherido porque es bastante frecuente que las saquen y se los traguen", añadió.
Paoli explicó que "lamentablemente este tipo de accidentes no ha disminuido; se dan con la misma frecuencia de siempre, siguen viniendo chicos con cuerpos extraños".
En este marco, la profesional insistió en que los padres y adultos "deben fijarse bien las recomendaciones de los juguetes y donde los compran, porque tienen que tener un sello de seguridad".
Con respecto a los trastornos que pueden sufrir los chicos en estas situaciones, la especialista detalló que en el caso del oído "se puede producir una perforación de tímpano, que es algo que se puede solucionar, pero en el caso de la nariz, tenemos pacientes que, por la introducción de las pilas tuvieron perforación de tabique, lo que requiere una atención especializada de forma rápida y efectiva".
Cuando el chico se traga el cuerpo extraño "hay que controlar que, si fue por la vía digestiva, lo elimine; en cambio si va por la vía aérea es mas problemático porque el chico capaz que hace un episodio, tose y se le pasa pero con el tiempo pueden aparecer síntomas y hay que estar alertas".
La especialista advirtió que muchas veces los adultos no llegan a darse cuenta, a pesar de estar junto al niño, que se introdujo alguna pequeña pieza de un juguete, porque los chicos son muy hábiles y rápidos, solo es cuestión de un segundo, y no tienen conciencia del peligro.
"Es muy común que el chico no avise cuando ocurre un accidente y entonces los padres se dan cuenta tiempo después, ante síntomas puntuales como inflamación del oído o neumonías a repetición, entonces el médico sospecha que hay un cuerpo extraño alojado en la vía aérea o en el canal auditivo", resumió la médica.
Desde el servicio de ORL del Clínicas resaltaron que "ante la sospecha de un accidente, se debe concurrir de inmediato a la guardia de emergencias; los padres no deben intentar retirar el cuerpo extraño por su cuenta, ya que una mala maniobra puede agravar la situación".
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