Muchas veces se dijo que no se puede tapar el sol con las manos, y es una gran verdad que en ocasiones nos muestra que no querer ver aquello que está sucediendo es un grave error.
Y este el caso de la relación entre el Presidente Mauricio Macri y el sumo Pontífice que según nuestro punto de vista nunca fue buena, no es buena y probablemente nunca lo será.
Si bien se dio la tan esperada visita de Macri al Vaticano, la imagen que le vamos a mostrar dista mucho de ser la esperada.
Y es que se lo ve a Macri y al Papa no muy felices, el Presidente tiene cara de no estar distendido sino todo lo contrario, se lo ve muy tenso.
Y la cara del Papa lo dice todo. No está feliz, no esta contento, y ni siquiera pudo disimularlo cuando la tomaron la fotografía.
La cara del Papa, es un claro reflejo de lo que le pasa cuando tiene a Mauricio Macri cerca. De nuevo: No se puede tapar el sol con las manos.
Si bien nos enseñaron desde chicos que hay que amar al prójimo como a uno mismo, esto no parece ser lo que refleja la imagen del Papa con Macri y su esposa.
Nos permitiremos dudar de si el Papa lo quiere a Macri y viceversa. Nos tomamos el atrevimiento de la duda ya que la relación entre ambos nunca fue de la mejor.
Y si usted cree que la relación entre el sumo Pontífice y Macri es de la mejor, solo tiene que mirar las fotografías que acompañan esta nota.
Ninguno pudo disimular “el mal momento” que estaban pasando. Tal vez la primera dama intentó esbozar una sonrisa, pero eso fue todo.
Esperamos con esta nota no haber herido susceptibilidades y como siempre puede dejarnos sus opiniones en los comentarios.
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