Arte. Un mural urbano exhibe a Jesús, el Papa y la Virgen de Guadalupe, en una calle por donde pasará Francisco.
Un México desconcertado y afectado por casos de corrupción, mentira y violencia recibirá a partir del viernes al Papa Francisco, líder de una Iglesia que en el caso mexicano no logra definir con claridad su lugar, su misión y su palabra.
En una visita de gran significado y trascendencia para esta hora del país, que se extenderá del 12 al 17 de febrero, Francisco definió un programa intenso que lo llevará de una región a otra y a zonas verdaderamente calientes.
Visitará, primero, el corazón de la nación, la ciudad de México; después irá al sureste donde se asientan los pueblos originarios; luego viajará a Michoacán, tierra que han hecho suya los diferentes grupos del crimen organizado, y de allí se trasladará al norte del país, al territorio de Ciudad Juárez, testigo del dolor de tantos, inexplicables e impunes femicidios como también de la tragedia de la muerte y ejecución de cientos de migrantes a manos de grupos criminales.
En un mensaje que hizo llegar a México, el Papa dijo que llegará "como un peregrino, con el corazón abierto".
Producido y distribuido por la agencia estatal de noticias Notimex, el Pontífice criticó "el clima que vivimos hoy en el mundo" que incluye "violencia, corrupción, guerra, niños que no pueden ir a la escuela por sus países en guerra, tráfico y fabricantes de armas".
"Y ustedes están viviendo su pedacito de guerra, de sufrimiento, de violencia, de tráfico organizado", recalcó el obispo de Roma en el mensaje difundido con el título "Francisco camino a México".
"El México de la violencia, el México de la corrupción, el México del tráfico de drogas, el México de los carteles, no es el México que quiere nuestra Madre, y, por supuesto que yo no quiero tapar nada de eso, al contrario, exhortarlos a la lucha de todos los días contra la corrupción, contra el tráfico, contra la guerra, contra la desunión, contra el crimen organizado, contra la trata de personas", remarcó.
A metros del Río Bravo que separa México de Estados Unidos, el Papa celebrará en Ciudad Juárez una de las misas más significativas para interceder por todos aquellos que han tenido que abandonar sus hogares (ver aparte).
Indígenas. El Papa Francisco recibirá ejemplares de la Biblia traducida al tseltal y el tsotsil, dos lenguas indígenas mayas, al final de una misa dedicada a los indígenas el lunes 15 en San Cristóbal de Las Casas.
En la misa a la que asistirán unas 100.000 personas, en su mayoría indígenas, habrá numerosos elementos autóctonos. El altar contará con una representación de la pirámide maya de Palenque, la indumentaria tendrá bordados locales, las lecturas se harán en distintas lenguas nativas y habrá una danza ritual de acción de gracias, además de que el Papa almorzará con ocho indígenas.
Además de recibir la Biblia en lenguas mayas, Francisco emitirá al terminar la misa un decreto para el reconocimiento del náhuatl como lengua litúrgica, según adelantó el obispo de San Cristóbal, Felipe Arizmendi en un encuentro con corresponsales alemanes.
El náhuatl es la lengua de los aztecas, hablada todavía por más de un millón de personas.
Twitter. Twitter creó cinco emoticons exclusivos para la visita. La cara del Papa sobre una bandera mexicana, las catedrales de Michoacán, San Cristóbal de las Casas y Ciudad Juárez, y el Angel de la Independencia son las imágenes elegidas para conmemorar el viaje. En colaboración con el episcopado mexicano, Twitter creó la etiqueta oficial #PapaenMex y apuesta a generar miles de mensajes.
Misa por los migrantes en Ciudad Juárez, a metros de la frontera
Fuente: La Capital
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