El DT trabajó para dejar atrás la alegría del clásico, poner la cabeza en Sarmiento y volver a ganar de local. También quiere que la gente no se relaje y presione por el triunfo.
La Capital |
El Chacho siente que no hay temor y tampoco cierta intriga sobre cómo pueda reaccionar su equipo en ese famoso posclásico, al que muchos vienen haciendo referencia. “No es que tenga algún temor, simplemente recalcamos la importancia de los tres puntos porque queremos ganar de local. No somos ajenos a que se trata de una semana distinta, pero debemos cambiar el chip porque el clásico ya pasó y hoy es Sarmiento”, se sinceró el DT. Y agregó: “La idea fue meterle un corte desde el arranque de la semana porque todos sabemos lo difícil que es el posclásico por todo lo que se genera en la previa, por la intensidad con la que se vive. Tal vez somos los que menos podemos disfrutar de un logro tan importante como el del domingo, pero para eso está la gente. Y a esa gente si le tenemos que pedir algo es que nos exija desde el primer minuto”.
La categoría de protagonista que hoy tiene el equipo es parte de esa obligación a la que hace referencia el técnico. Pero también está esa racha de no poder ganar de local que debe ser revertida para potenciar, precisamente, esa condición de animador del torneo. “Hace varios partidos que no ganamos en casa, es una cuenta pendiente y tenemos la necesidad de hacerlo”.
A Coudet le “duele” no haber podido ganar los últimos cuatro partidos (Huracán, Lanús, Independiente y Vélez) en el Gigante, pero de la misma forma reconoce que “los trabajamos como para quedarnos con los tres puntos. Creo que de los cuatro, en tres las figuras fueron los arqueros rivales. Seguramente debemos producir más, mejorar y terminar ganándolos. No hay excusas sobre eso porque si bien hicimos buenos partidos no pudimos sumar de a tres. El margen de error es cada vez menor y en estos días trabajamos para un partido que va a ser duro”.
Que en la mayoría de esos cuatro partidos los arqueros rivales hayan sido figura podría llevar que sólo se trata de ciertos hechos puntuales y no de un determinado comportamiento futbolístico del equipo. El Chacho advierte que “cuando uno erra goles se focaliza en practicar definición pero lo que veo es que le estamos embocando al arco”, dijo. Y bromeó: “El problema es que los arqueros las están sacando (risas). Todo se puede mejorar, pero siempre jugamos 90 minutos buscando el resultado manteniendo una idea y una forma y no tirando pelotazos. Rescato que el equipo no entra nunca en estado de desesperación. Por supuesto en nuestra cabeza está la idea de ser más contundentes”.
“Tendremos que encontrar los espacios con mucha gente para generar situaciones de gol, pero a la vez estar atentos para que no nos conviertan. En líneas generales al equipo lo veo muy bien porque noto que genera mucho y que le patean muy poco. Ese creo que es el ideal para un entrenador y para un equipo. De ahí en más volvemos a lo que es la realidad en esto de que no es una cuestión de merecimientos sino de ganar”, abundó el DT.
La categoría de protagonista que hoy tiene el equipo es parte de esa obligación a la que hace referencia el técnico. Pero también está esa racha de no poder ganar de local que debe ser revertida para potenciar, precisamente, esa condición de animador del torneo. “Hace varios partidos que no ganamos en casa, es una cuenta pendiente y tenemos la necesidad de hacerlo”.
A Coudet le “duele” no haber podido ganar los últimos cuatro partidos (Huracán, Lanús, Independiente y Vélez) en el Gigante, pero de la misma forma reconoce que “los trabajamos como para quedarnos con los tres puntos. Creo que de los cuatro, en tres las figuras fueron los arqueros rivales. Seguramente debemos producir más, mejorar y terminar ganándolos. No hay excusas sobre eso porque si bien hicimos buenos partidos no pudimos sumar de a tres. El margen de error es cada vez menor y en estos días trabajamos para un partido que va a ser duro”.
Que en la mayoría de esos cuatro partidos los arqueros rivales hayan sido figura podría llevar que sólo se trata de ciertos hechos puntuales y no de un determinado comportamiento futbolístico del equipo. El Chacho advierte que “cuando uno erra goles se focaliza en practicar definición pero lo que veo es que le estamos embocando al arco”, dijo. Y bromeó: “El problema es que los arqueros las están sacando (risas). Todo se puede mejorar, pero siempre jugamos 90 minutos buscando el resultado manteniendo una idea y una forma y no tirando pelotazos. Rescato que el equipo no entra nunca en estado de desesperación. Por supuesto en nuestra cabeza está la idea de ser más contundentes”.
“Tendremos que encontrar los espacios con mucha gente para generar situaciones de gol, pero a la vez estar atentos para que no nos conviertan. En líneas generales al equipo lo veo muy bien porque noto que genera mucho y que le patean muy poco. Ese creo que es el ideal para un entrenador y para un equipo. De ahí en más volvemos a lo que es la realidad en esto de que no es una cuestión de merecimientos sino de ganar”, abundó el DT.
La solidez defensiva, uno de los bastiones
Transcurridas tres fechas desde el reinicio del torneo, Eduardo Coudet se anima marcar algunas virtudes que, cree, se potenciaron en relación a las primeras 15 fechas. En ese sentido el técnico canalla dijo: “Estamos siendo más sólidos defensivamente porque nos están pateando muy poco al arco y en medio de eso nosotros seguimos llegando y generando. Desde ese punto de vista lo veo muy bien y es una gran base”. Pero el Chacho es de esos entrenadores a los que no les gusta posar la mirada allá a lo lejos, sino en lo inmediato. Por eso destacó: “Acá apuntamos a cada partido y lo que se viene es Sarmiento, que es un equipo que se repliega muy bien. No hay otra cosa que se nos cruce por la cabeza que no sea quedarnos con los tres puntos”.
Un día más para definirlo
Eduardo Coudet no tuvo otra que tomarse un tiempito más para definir los once que mañana recibirán a Sarmiento. La idea la tiene clara, pero aparecieron algunas complicaciones que le impidieron trabajar con todos los futbolistas que tenía en mente, básicamente por el lado de Damián Musto, quien ayer no pudo participar del entrenamiento a raíz de un cuadro febril. Del ensayo futbolístico, que fue más corto que lo habitual, también se quedó al margen César Delgado, quien fue preservado. De todas formas el Chacho confía en que podrá contar con ambos y si eso ocurre repetirá equipo, algo que se daría por segunda vez en el torneo (ver aparte).
De arranque la lluvia alteró los planes. La práctica de fútbol que estaba prevista en el Gigante de Arroyito se trasladó a Arroyo Seco y fue precisamente porque el campo de juego estaba algo pesado el técnico optó por dejar de lado a Delgado, quien desde el inicio de la semana arrastra una sobrecarga en el isquitotibial derecho. “Creemos que no va a tener problemas en jugar, lo de hoy (ayer) fue meramente por precaución”, dijo Coudet fuera de micrófono.
Lo que no estaba en los planes era la situación de Musto. El volante central se comunicó con el cuerpo técnico. Adujo que estaba con fiebre y por eso le dieron permiso para que se quedara en su casa. A él también habrá que esperar, al menos hasta hoy, para ver cómo evoluciona, pero el optimismo es total de parte de Coudet y sus colaboradores.
Por todo esto el Chacho ordenó algunos pocos minutos de fútbol, en los que debió echar mano a franco Niell y José Luis Fernández, lo que llevó consigo un cambio de esquema. Es que Franco Cervi se recostó por derecha, Fernández fue el ladero (aunque más adelantado) de Nery Domínguez en el anillo central, mientras que Niell actuó como atacante, al lado de Marco Ruben.
“No les quiero decir algo que por ahí mañana tenga que cambiar”, explicó Coudet a la hora de hablar sobre el equipo para mañana. No obstante, el convencimiento de que tendrá a todos a disposición es total y si eso ocurre no habrá variantes. El partido que su equipo hizo en el Coloso del Parque lo dejó más que conforme y es lo que tiene pensado poner en cancha mañana en el Gigante frente a Sarmiento.
De arranque la lluvia alteró los planes. La práctica de fútbol que estaba prevista en el Gigante de Arroyito se trasladó a Arroyo Seco y fue precisamente porque el campo de juego estaba algo pesado el técnico optó por dejar de lado a Delgado, quien desde el inicio de la semana arrastra una sobrecarga en el isquitotibial derecho. “Creemos que no va a tener problemas en jugar, lo de hoy (ayer) fue meramente por precaución”, dijo Coudet fuera de micrófono.
Lo que no estaba en los planes era la situación de Musto. El volante central se comunicó con el cuerpo técnico. Adujo que estaba con fiebre y por eso le dieron permiso para que se quedara en su casa. A él también habrá que esperar, al menos hasta hoy, para ver cómo evoluciona, pero el optimismo es total de parte de Coudet y sus colaboradores.
Por todo esto el Chacho ordenó algunos pocos minutos de fútbol, en los que debió echar mano a franco Niell y José Luis Fernández, lo que llevó consigo un cambio de esquema. Es que Franco Cervi se recostó por derecha, Fernández fue el ladero (aunque más adelantado) de Nery Domínguez en el anillo central, mientras que Niell actuó como atacante, al lado de Marco Ruben.
“No les quiero decir algo que por ahí mañana tenga que cambiar”, explicó Coudet a la hora de hablar sobre el equipo para mañana. No obstante, el convencimiento de que tendrá a todos a disposición es total y si eso ocurre no habrá variantes. El partido que su equipo hizo en el Coloso del Parque lo dejó más que conforme y es lo que tiene pensado poner en cancha mañana en el Gigante frente a Sarmiento.
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