lunes, 7 de mayo de 2012

NAC. Velan los restos del futbolista de Banfield asesinado ayer

Un policía, de civil, intentó evitar que le roben la moto a su hija y con su arma reglamentaria efectuó siete disparos. Uno de ellos hirió mortalmente al jugador Lautaro Bugatto que salía de su casa con amigos para ir a bailar. David Benítez está detenido, acusado de "homicidio simple" y será indagado en las próximas horas.

 Los restos del futbolista Lautaro Bugatto (20), quien fue asesinado ayer de un balazo en la puerta de su casa por un policía que aparentemente pretendió evitar un robo, eran velados esta mañana en la sede del club Banfield y, durante el mediodía, serán inhumados en el cementerio de Longchamps.
En tanto, el efectivo detenido de la Policía Buenos Aires 2, David Benítez (32), será indagado por un fiscal de Lomas de Zamora en las próximas horas, acusado del delito de "homicidio simple", el cual prevé penas de hasta 25 años de cárcel.

En un comunicado emitido anoche, el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, expresó su "indignación" por el homicidio del futbolista y aseguró que el policía detenido "violó la ley, la reglamentación y disposiciones administrativas sobre el uso del arma reglamentaria, normas que permanentemente se reiteran a todos los efectivos policiales".

Además, "en nombre del gobernador (Daniel Scioli) y todos sus colaboradores", expresó su "hondo pesar y acompañamiento a la familia, amigos y compañeros del club Banfield".

El representante de Bugatto, Adrián Romero, lamentó la muerte del futbolista y lo recordó "como una gran persona, muy querida por sus familiares, amigos, por todos los que lo conocían. Era el sostén de su familia y un gran jugador, con mucho futuro".

Fuentes policiales y judiciales informaron a Télam que el hecho ocurrió cerca de las 3 de la madrugada de ayer en el cruce de avenida Monteverde y Pedro Goyena, de Burzaco, partido de Almirante Brown, en la zona sur del conurbano.

Todo comenzó cuando el efectivo Benítez, que estaba franco de servicio y vestido de civil, se desplazaba a bordo de su Renault 12 junto a su esposa, mientras que delante del auto su hija menor de edad y su hermana se movilizaban en una moto marca Zanella.

Según las fuentes, de acuerdo a la versión de los familiares de Benítez, dos delincuentes armados quisieron robar ese ciclomotor, por lo que el policía se resistió con su arma reglamentaria y efectuó varios disparos hacia los asaltantes.

Aparentemente, uno de estos balazos impactó en el cuerpo de Bugatto, quien estaba ubicado a unos 30 metros de distancia.

Al momento de los disparos, la víctima se encontraba en la puerta de su casa junto a un hermano y dos amigos con los que iba a salir a bailar en su Peugeot 206 gris.

Bugatto recibió un tiro en el pecho, por lo que sus amigos lo cargaron en el automóvil y lo llevaron a un centro asistencial de la zona, donde finalmente murió.

Las fuentes judiciales señalaron a Télam que en el lugar del hecho se secuestraron siete vainas servidas de 9 milímetros, del mismo calibre que el arma reglamentaria de Benítez que fue secuestrada para ser sometida a peritajes balísticos.

Además, en la escena del crimen los peritos no advirtieron signos de que se haya disparado una segunda arma ni observaron impactos de bala en el auto del policía que abonarían la hipótesis de que los presuntos delincuentes tiraron contra Benítez.

El hecho está siendo investigado por el fiscal Juan José Vaello, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del Departamento Judicial Lomas de Zamora, quien indagará a Benítez en las próximas horas.

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