Los goles del Tiburón fueron convertidos por José Sand uno en cada tiempo. El empate transitorio lo anotó Emanuel Brítez para el Tate. El equipo de Teté Quiróz fue más práctico y se impuso con justeza.
Diario UNO |
En el estadio 15 de Abril, Aldosivi venció anoche por 2-1 a Unión, con un doblete de José Sand; pese el empate transitorio que había marcado Emanuel Britez, y se metió en la siguiente instancia de la Liguilla Sudamericana. De esta manera, los de Mar del Plata continúan en busca de la histórica participación al certamen internacional. El árbitro fue Saúl Laverni, quien en el inicio cobró un penal inexistente para el Tiburón y luego «¿a instancias de la TV?» lo anuló.
El arranque fue intenso y caliente y no porque ambos tuvieran jugadas claras, sino porque el pésimo árbitro, Saúl Laverni, cometió un horror futbolístico al cobrar penal para el Tiburón a los 2’, tras una supuesta falta de Nereo Fernández sobre Santiago Rosales. Eso produjo que los jugadores Tatengues se le fueron rápidamente encima al juez en gran disconformismo, aunque éste dio marcha atrás en su decisión a instancias de sus colaboradores, que le indicaron por el audífono la inexistencia de la infracción. Y tomando como referencia el grosero error, el colegiado no cesó de pedir disculpas al estadio, reconociendo una falla que le hubiese dado un giro vital en el encuentro.
Pasado este hecho anecdótico del polémico Laverni, el primer cuarto del cotejo fue desprolijo, aunque la iniciativa siempre por parte del elenco dirigido por Leonardo Madelón, buscando sobre todo por los carrileros a Diego Villar e Ignacio Malcorra. Mientras que Aldosivi apostó a la búsqueda de Pablo Lugüercio por la derecha o ya sea a los pelotazos largos a José Sand, sin utilizar, por momentos, la ductilidad del zurdo Santiago Rosales.
El trámite siguió siendo favorable al local, pero solo en la intención y no en la generación de peligro sobre la valla de Pablo Campodónico, porque fue muy vertiginoso el juego que desplegó, además de que se observó un equipo acelerado del medio hacia adelante.
Para completar la mala noche del árbitro y, también ahora del segundo asistente, a los 28’, llegó el gol de Pepe Sand para la visita, pero después de cometerle infracción a Marcelo Cardozo, que quedó tirado en el piso justo en la zona en donde finalmente el atacante luego ingresó al área y venció al golero local. Baldazo de agua helada en el estadio 15 de Abril.
Con este gol, Aldosivi terminó de desacomodar al Tatengue en todas sus líneas y se desnaturalizó el trámite, no sólo porque la formación Rojiblanca no encontró nunca la idea de un equipo sólido, sino también porque cayó en el juego rival. Pero así y todo, a los 41’ casi lo empata a través del delantero Franco Soldano, aunque el arquero contrario respondió en forma excelente tapando el remate. Tan evidente fue la pobreza del rendimiento del dueño de casa que el disparo de Franco Soldano fue el único.
Debido al mal desempeño de la formación y al resultado negativo, Madelón sacó a los 45’ a Mauricio Martínez y puso en campo a Lucas Gamba para jugar con tres hombres de punta y que quede Matías Sánchez como único volante central. Pero más allá de dicha variante, ya ni hubo tiempo para nada en una etapa que, en juego, el Tate estuvo a años luz de mostrar mínimamente una imagen positiva; fue todo lo contrario y, como ya es una mala costumbre con Laverni como protagonista, mucho fue lo negativo en la noche en la Avenida. De igual modo, no justificó el rendimiento irregular y desteñido que tuvo la formación santafesina.
Golpe a la ilusión
El comienzo de la parte final fue inmejorable para Unión, porque de arrebato y, después de un centro excelente de Nacho Malcorra, el Rojiblanco empató rápidamente con un cabezazo de Emanuel Britez. Estalló el 15 de Abril y le dio rienda suelta a un nuevo partido.
Luego del empate, el dueño de casa metió al Tiburón en su propio campo; con actitud, presión y amor propio ahogó al contrario, que solo intentó jugar de contragolpe. Y el abanderado fue Pipa Villar, factor fundamental en la mejoría del funcionamiento, bien secundado por Malcorra y las subidas de Marcelo Cardozo.
Pero de tanto ir se descuidó, presionaron a Cardozo, Roger Martínez ganó la cuerda por la derecha y metió centro pasado y perfecto para que José Sand aparezca solo y sin problemas para poner, de cabeza, el 2-1 a los 20’. Y tres minutos más tarde, Nereo Fernández tapó lo que hubiese sido el tercero para la visita.
La conquista marplatense nuevamente desacopló todos los buenos intentos que estaba haciendo para terminar de dar vuelta el resultado. Madelón colocó a Juan Rivas por Cardozo y armó una línea de tres en el fondo. Y a los 29’, hizo modificación de delantero por delantero al colocar a Facundo Castro en lugar de Claudio Riaño, pero los nervios también empezaron a jugar un papel vital y negativo para Unión.
El reloj se convirtió en el jugador número 12 para la alineación comandada por Teté Quiroz, que cedió la iniciativa ante un equipo lleno de imprecisiones y jugado totalmente al ataque. El rival utilizó como otra arma el hacer tiempo y, para colmo, a Unión no se le cayó una idea, salvo en los primeros 10’ de la parte final. Después, con el resultado negativo, fueron todos simples arrebatos y centros al área del arquero Campodónico.
Así las cosas fueron sucediéndose como nadie lo esperaba y preveía en el estadio 15 de Abril, que era una caldera. Llegó el pitazo final de Saúl Laverni con la victoria de Aldosivi por 2-1. La inteligencia defensiva se sobrepuso a la impotencia futbolística, tal cual se observó en la última parte del torneo de Primera División.
Perdió de pie, pero seguramente que lo quedará es esta última imagen y no todo lo muy bueno que se hizo durante este 2015.
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