El Sabalero y el Tiburón juegan este sábado desde las 18.15 con arbitraje de Federico Beligoy. Osella pone a Callejo por Llama y la ratificó a los mismos jugadores que ganaron en el último partido de local.
/El Litoral |
Colón ya está en Mar del Plata desde esta mañana, concentrado en un hotel ubicado en la mítica rambla de la Feliz, descansando del largo viaje y esperando el entrenamiento de esta tarde, que será muy liviano y a la espera del partido de mañana ante Aldosivi.
La última vez que los rojinegros jugaron en esta ciudad, fue en 2004, cuando al equipo lo dirigía Basile y vencía a Huracán de Tres Arroyos por 3 a 2. Pero hace más de 35 años que no enfrenta, en Mar del Plata, a un equipo de la Feliz. Esto se dio en los viejos nacionales, cuando se midió con Kimberley primero, con San Lorenzo de Mar del Plata después y finalmente con Alvarado, en el estadio General San Martín ya desaparecido. Es decir que esta será la primera vez que Colón jugará ante un equipo de Mar del Plata en el estadio mundialista José María Minella.
Haberle ganado a Nueva Chicago fue importante, la ventaja en el resultado también, pero ayuda en el análisis el buen rendimiento del equipo. Los primeros 20 minutos (cuando Llama estuvo en cancha) y el segundo tiempo, fueron para rescatar. El equipo tuvo eficacia arriba y solidez defensiva. “Me dí cuenta que tenía que parar al equipo un poco más arriba y me alegra que eso no disminuyó nuestra eficacia para defender”, fueron las palabras de Osella, cuando hizo el análisis del partido.
Por eso, el técnico no dudó: Callejo por Llama y la ratificación de los mismos jugadores que le ganaron a los de Labruna. La idea, seguramente, será la de poblar el mediocampo y aprovechar la rápida salida por los costados, con dos volantes que tienen alma de delantero: Callejo y Villarruel, éste último de muy buen trabajo ante Chicago.
Franco Leys hizo lo suficiente para seguir siendo titular, la defensa no perdió solidez con la aparición de Garnier para jugar por derecha, de Olivera para jugar por el centro al lado de Landa y de Lazzaroni para marcar la punta, y arriba se confía en la agresividad de Alario y Telechea.
Probablemente, Colón tenga pasajes del partido en los que resuelva esperar a Aldosivi y jugarle de contragolpe. A priori, el planteo de Berti es con tres hombres de punta. Los marplatenses, que buscan el ascenso, han reforzado el equipo con una gran cantidad de jugadores (15 en total) y todavía está en formación. De todos modos, jugadores como Lugüercio y Carranza, por mencionar algunos, son de cuidado para una defensa rojinegra que no deberá perder solidez, para luego aprovechar las amplias dimensiones de la cancha para agrandar espacios en ataque.
“Con 30 puntos se asciende”, dijo Osella. Colón está dentro de esos parámetros, pues suma 5 sobre 9 en juego. No haber ganado el primer partido de local lo “obliga” a conseguir un buen resultado en esta excursión a Mar del Plata para no perder terreno, aún cuando esto recién empieza y falta mucho terreno por recorrer todavía.
En cuanto a Aldosivi, los regresos a la titularidad de Angel Vildozo y Pablo Lugüercio, en reemplazo de Gonzalo Bozzoni y Nicolás López Macri, serían las modificaciones en el equipo titular.
Aunque el DT Alfredo Berti no confirmó a los titulares, todo parece indicar que ya tiene en mente a los once para recibir al sabalero. En la práctica de ayer, 25 minutos de fútbol, los titulares vencieron 3-1 a un mix formado entre relevos y juveniles. Los tres goles, todos de cabeza, los convirtió Angel Vildozo. Y Pablo Lugüercio, con una férula en lugar del yeso que llevó varios días por la fractura del cuarto metacarpiano de su mano izquierda, se movió sin inconvenientes.
En el equipo titular está Ismael Quilez, un ex Colón,mientras que para el banco de suplentes está convocado Alejandro Capurro, quien concentró para el partido de mañana ante su ex club. A propósito de Capurro, estuvo en los planes de Osella pero finalmente se desistió de su contratación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario