Un grupo de vecinos inició
acciones judiciales para detener la edificación de dos torres en calle
Güemes. Están juntando firmas para solicitar la urgente revisión de la
ordenanza vigente.
Vecinos de Candioti Sur se encuentran en estado de alerta y
movilización ante lo que consideran “un cambio inexplicable” en la
regulación de la construcción en altura. Explican que “de ser un barrio
residencial con densidad poblacional media-baja, pasó a ser un barrio
pasible de alumbrar torres de 10 pisos en cualquier momento. Es algo
inaceptable para la mayoría de los vecinos”, insistieron.
Al ponerse en conocimiento de la modificación de la ordenanza que limitaba la construcción en altura a través de un anuncio de una empresa inmobiliaria, un grupo de ciudadanos inició acciones judiciales para detener la construcción de un gigantesco complejo de torres en calle Güemes.
Además se colgaron una serie de pasacalles en las arterias del barrio más comprometidas por la nueva regulación, y están reuniendo firmas para comunicarles su preocupación al intendente José Corral, y solicitando una urgente revisión de la ordenanza vigente.
Indignados se preguntan: “¿Cómo es que saltamos de la ordenanza 11.613 (que permitía construcciones hasta 9 metros) a la 11.748 (que habilita edificaciones de hasta 30 metros) sin término medio? Literalmente hablando, el Ejecutivo triplicó la altura permitida de construcción sin medias tintas”. Argumentan.
Fisonomía tradicional
El barrio Candioti Sur tiene una marcada identidad histórica ligada al desarrollo del ferrocarril francés y al puerto de ultramar, definida por construcciones bajas de alta riqueza arquitectónica. Durante años, el gobierno municipal entendió este concepto y en cooperación con la vecinal Candioti Sur y los vecinos, en 2009 se elaboró y se dictó la ordenanza Nº 11.613, donde se limitaba la construcción en altura a planta baja y dos pisos.
Sin embargo, esta ordenanza fue modificada y en agosto del año pasado, se estableció una altura edificable tope de 18 metros sobre la línea municipal, y se puso también un límite de hasta 30 metros como máximo para aquellas nuevas edificaciones que se realicen sobre terrenos retirados de dicha línea. Esta modificación rige sobre parcelas frentistas que se ubiquen sobre calle Necochea, Güemes y Calchines.
En un comunicado que fue distribuido en el barrio, los vecinos se preguntan: “¿con qué artilugio arbitrario se declaró «varios» a las calles mencionadas y se habilitó la construcción masiva de edificaciones en altura, donde prácticamente no hay manzana del barrio que no se vea afectada?”.
Se preguntan también si advirtieron algún cambio en el ancho de la calzadas, y expresaron irónicamente: “Resulta que ahora vivimos en el barrio que más «avenidas» tiene la ciudad”.
Dirigiéndose a los vecinos de Candioti Sur, y con el objetivo de ponerlos en conocimiento de la situación del barrio, distribuyeron además un folleto que dice lo siguiente: ¿Sabía usted que la actual administración municipal dejó sin efecto la ordenanza que limitaba construir hasta 9 metros de altura?, ¿sabía usted que con las modificaciones introducidas en las calles Necochea, Calchines y Güemes ahora se habilita construir al doble de altura?, ¿sabía usted que si las dimensiones del terreno lo permiten se puede construir edificios de 10 pisos?”.
Y concluyen: “Solicitemos a nuestros representantes la modificación de la norma recientemente aprobada que libera la construcción de edificios de gran altura, para mantener un crecimiento acorde a la historia y características del barrio ¡Estemos movilizados!”.
El barrio en alerta
Alberto, un vecino de Candioti Sur, explicó que la intención de la “movida” es que se habilite la posibilidad de discutir el tema. Entre las acciones que vienen realizando indicó: “Estamos tratando de movilizar al barrio. Le estamos preguntando a los vecinos si están de acuerdo y hasta ahora se opone la mayoría. Además estamos con acciones judiciales-administrativas”.
En tanto, aclararon: “Nosotros estamos con la construcción pero queremos moderarla para que se respete la cara del barrio. Queremos sentarnos a hablar. Hay familias que hace tres generaciones que viven en el barrio y creemos que como ciudadanos tenemos derecho a opinar.
Finalmente, Alberto comentó que la intención es retomar las acciones de sensibilización de los vecinos en febrero para lograr ser atendidos por algún funcionario.
Al ponerse en conocimiento de la modificación de la ordenanza que limitaba la construcción en altura a través de un anuncio de una empresa inmobiliaria, un grupo de ciudadanos inició acciones judiciales para detener la construcción de un gigantesco complejo de torres en calle Güemes.
Además se colgaron una serie de pasacalles en las arterias del barrio más comprometidas por la nueva regulación, y están reuniendo firmas para comunicarles su preocupación al intendente José Corral, y solicitando una urgente revisión de la ordenanza vigente.
Indignados se preguntan: “¿Cómo es que saltamos de la ordenanza 11.613 (que permitía construcciones hasta 9 metros) a la 11.748 (que habilita edificaciones de hasta 30 metros) sin término medio? Literalmente hablando, el Ejecutivo triplicó la altura permitida de construcción sin medias tintas”. Argumentan.
Fisonomía tradicional
El barrio Candioti Sur tiene una marcada identidad histórica ligada al desarrollo del ferrocarril francés y al puerto de ultramar, definida por construcciones bajas de alta riqueza arquitectónica. Durante años, el gobierno municipal entendió este concepto y en cooperación con la vecinal Candioti Sur y los vecinos, en 2009 se elaboró y se dictó la ordenanza Nº 11.613, donde se limitaba la construcción en altura a planta baja y dos pisos.
Sin embargo, esta ordenanza fue modificada y en agosto del año pasado, se estableció una altura edificable tope de 18 metros sobre la línea municipal, y se puso también un límite de hasta 30 metros como máximo para aquellas nuevas edificaciones que se realicen sobre terrenos retirados de dicha línea. Esta modificación rige sobre parcelas frentistas que se ubiquen sobre calle Necochea, Güemes y Calchines.
En un comunicado que fue distribuido en el barrio, los vecinos se preguntan: “¿con qué artilugio arbitrario se declaró «varios» a las calles mencionadas y se habilitó la construcción masiva de edificaciones en altura, donde prácticamente no hay manzana del barrio que no se vea afectada?”.
Se preguntan también si advirtieron algún cambio en el ancho de la calzadas, y expresaron irónicamente: “Resulta que ahora vivimos en el barrio que más «avenidas» tiene la ciudad”.
Dirigiéndose a los vecinos de Candioti Sur, y con el objetivo de ponerlos en conocimiento de la situación del barrio, distribuyeron además un folleto que dice lo siguiente: ¿Sabía usted que la actual administración municipal dejó sin efecto la ordenanza que limitaba construir hasta 9 metros de altura?, ¿sabía usted que con las modificaciones introducidas en las calles Necochea, Calchines y Güemes ahora se habilita construir al doble de altura?, ¿sabía usted que si las dimensiones del terreno lo permiten se puede construir edificios de 10 pisos?”.
Y concluyen: “Solicitemos a nuestros representantes la modificación de la norma recientemente aprobada que libera la construcción de edificios de gran altura, para mantener un crecimiento acorde a la historia y características del barrio ¡Estemos movilizados!”.
El barrio en alerta
Alberto, un vecino de Candioti Sur, explicó que la intención de la “movida” es que se habilite la posibilidad de discutir el tema. Entre las acciones que vienen realizando indicó: “Estamos tratando de movilizar al barrio. Le estamos preguntando a los vecinos si están de acuerdo y hasta ahora se opone la mayoría. Además estamos con acciones judiciales-administrativas”.
En tanto, aclararon: “Nosotros estamos con la construcción pero queremos moderarla para que se respete la cara del barrio. Queremos sentarnos a hablar. Hay familias que hace tres generaciones que viven en el barrio y creemos que como ciudadanos tenemos derecho a opinar.
Finalmente, Alberto comentó que la intención es retomar las acciones de sensibilización de los vecinos en febrero para lograr ser atendidos por algún funcionario.
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