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lunes, 1 de agosto de 2016

Está en barrio San Martín Piden custodia policial para un centro de salud

Ante la reiteración de hechos delictivos, el personal del efector barrial hoy no atendió al público y se declaró en estado de asamblea permanente. El último ataque ocurrió el viernes.

Foto: Flavio Raina
De la Redacción de El Litoral
area@ellitoral.com

Los trabajadores del centro de salud N° 8 de barrio San Martín, en el norte de la ciudad, están asustados y preocupados. Así lo definió la delegada del gremio ATE, Viviana Servidio, tras un último intento de ataque en el establecimiento, ubicado en Estada y Alberti, el viernes al mediodía. A raíz del episodio, esta mañana no atendieron al público y se declararon en estado de asamblea permanente. 

Según relató Servidio, en representación de los trabajadores que tienen miedo de exponerse, el viernes al mediodía el personal estaba ocupado en sus tareas, cuando de pronto escucharon un fuerte golpe en una de las puertas de ingreso, sobre calle Alberti. “Un hombre joven le dio una patada, rompió la cerradura y la abrió. En ese momento pasaba un oficial de la policía que le gritó, salió corriendo y se subió a una moto con otro pibe que lo estaba esperando”, precisó. Este fue el segundo ataque en siete días. 

La semana anterior, ocurrió otro ataque en la misma puerta: “Una de las enfermeras se estaba retirando, cuando se da cuenta que había una moto con dos hombres merodeando. En un segundo uno se bajó y corrió hacia el centro. La enfermera logró meterse de nuevo y pudo cerrar la puerta antes que el hombre llegue”, relató Servidio quien agregó que las autoridades de Salud están al tanto de lo ocurrido. 

Inseguridad dispensario Barrio San Martin

La trabajadora estaba sola en el centro de salud al momento de retirarse. Tras el episodio del viernes, el gremio aguarda una reunión con funcionarios de Seguridad de la provincia, en la que solicitarán custodia policial permanente en el centro de salud. “Sabemos que no es bien visto por las autoridades de Salud tener un policía parado en la puerta, pero no nos queda otra, es un tema muy delicado”, remarcó Servidio. 

En alerta
 En abril y junio de este año, el mismo centro de salud fue blanco de robos y actos de vandalismo (Ver Casos anteriores). Ahora, con los últimos hechos descriptos el personal se siente observado. 

“El edificio tiene alarma, entonces como no pueden entrar por el ingreso principal, intentan por la del costado. Los trabajadores se sienten observados, acechados porque vienen cuando hay poca gente. A eso hay que agregarle que no son criaturas, son hombres de entre 20 o 30 años, no entendemos qué vienen a buscar acá”, enfatizó Servidio y agregó que “las cosas pasan al mediodía, a la vista de todos”. 

Mañana la atención en el centro será normal, aunque los trabajadores se mantendrán en estado de asamblea. “Lamentamos que con esto se resienta la atención, hoy vino un hombre a sacar turno para un ecodopler y no se le pudo dar. Pedimos disculpas pero no queremos que pase algo más grave”, concluyó la gremialista.
 

“En este centro de salud el principal problema es la inseguridad, al igual que en el resto del barrio. Está claro que están ensañados y queremos evitar que pase algo peor”.
Viviana Servidio
Delegada ATE
 Casos anteriores
En abril de 2016: delincuentes violentaron la reja de una ventana y se llevaron partes de una computadora y elementos de trabajo. Previamente robaron un tubo de oxígeno.
En junio de 2016: se llevaron computadoras y garrafas. Los delincuentes además fumaron adentro del edificio y sacaron vacunas de las heladeras, algunas antigripales que perdieron la cadena de frío y no sirvieron más.

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