"NO HABLÉ CON LOS DIRIGENTES"

Mario Sciacqua no conversó con la dirigencia sobre su futuro y dijo que seguirá en el cargo. Respecto del partido, el entrenador sabalero afirmó: “La derrota golpea”.

Las dudas se habían sembrado tras el empate con Estudiantes, cuando el equipo se retiró insultado del Brigadier López. Por eso anoche, consumada la victoria de Boca y la despedida de Colón de toda aspiración de luchar por el Apertura, la pregunta estaba al caer.
Sin embargo, Mario Sciacqua evitó hacer demasiadas referencias a su futuro y sólo dijo que “no hablé con los dirigentes”, algo que había hecho tras el duelo con el Pincha. Además, confirmó que estará en el próximo entrenamiento al frente del plantel y que ya piensa en Belgrano.
Con una voz cansada y sufrida, el DT enfrentó los micrófonos -ninguno de los jugadores habló- y ante la insistencia de los cronistas sobre su continuidad respondió: “No hablé con los dirigentes”, dejando en claro que su intención es seguir.
Luego, reconoció que “la derrota obviamente golpea” e intentó explicar la segunda caída de su elenco en el certamen, la segunda de local. Para el DT la clave estuvo en las conquistas xeneizes porque “empezamos un partido en el que ellos dominaban. El gol nos golpeó. Ahí adelantamos las líneas, habíamos tenido una chance en el cero a cero”.
Luego, confesó que se fue “preocupado por la derrota porque fue de local y era el partido que trabajamos toda la semana para ganarlo y no pudimos”. Y volvió sobre su idea principal: “Futbolísticamente, los dos goles nos golpearon”.
Más allá de que Boca acertó, Sciacqua reconoció que “desde la posesión, nos sacaron la pelota. Nuestra idea era cortar y jugar de contra. Por momentos lo hicimos, pero ellos manejaron más la pelota”. A lo cual agregó: “Hasta el gol fue parejo. Tuvimos un par de chances. Cuando nos hicieron el gol fuimos a jugar más adelante. Lo planteamos igual en el segundo tiempo. Pero el segundo gol fue un golpe duro, el equipo se desordena. Nos ganaron bien”.
Entre los problemas que debe resolver, el entrenador rojinegro apuntó a los comienzos, momento en el cual al equipo le cuesta hacer pie. “El inicio nos cuesta. A medida que pasan los minutos nos vamos acomodando, pero los partidos duran 90’. La idea es ser más ofensivos. Tenemos que trabajar para que este tipo de situaciones”.
Además, apuntó a la eficacia ofensiva al decir que “antes generábamos poco y convertíamos. Ahora generamos y no convertimos. En eso tenemos que trabajar”.
Ahora es tiempo de mirar para adelante y encontrar nuevamente el rumbo. El duelo con el Pirata es la oportunidad. “El objetivo -concluyó el entrenador sabalero- es jugar con Belgrano y reponernos, volver a ser el Colón que se vio con San Lorenzo y con Independiente”.