Franco vivía en el séptimo piso de la torre de atrás del edificio siniestrado en calle Salta. Este lunes pudo darle un abrazo a Mauro, un bombero que sigue trabajando en la zona cero.
Cómo no agradecer cuando lo que está en juego es la vida. Franco, uno de los sobrevivientes de la tragedia de calle Salta –vivía en el séptimo piso de la torre de atrás del edificio siniestrado– pudo este lunes darle un abrazo a Marcos, el bomberos que lo rescato.
Franco lo fue a buscar a la zona cero y las cámaras de El Tres fueron testigos del reencuentro. Franco recordó que estaba acostado, cree que afectado por la pérdida de gas y cuando se podujo la explosión salió volando.
Mauro fue quien subió, lo encontró y lo bajó. Pero su trabajo no terminó allí. Este lunes continuaba trabajando en la remoción de escombros.
Pero él no le da mayor importancia. “Los bomberos zapadores nos capacitamos día a día para dar respuesta a la sociedad”, afirmó.
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