Tal como sucedió en el período otoñal, desde este sábado a partir de las 11 y hasta las 17, una variedad de opciones para grandes y chicos se podrán disfrutar en Santiago del Estero, entre Francia y Urquiza. Frente al emblemático edificio del conocido Mercado Norte, habrá juegos para los niños, un paseo de diseñadores y promociones en los comercios.
Este sábado -si las condiciones climáticas lo permiten- el recuperado edificio del Mercado Norte -ubicado sobre Santiago del Estero entre Francia y Urquiza- reeditará la propuesta “Sábados del Mercado”, donde habrá diferentes actividades para el disfrute de grandes y chicos, que se mezclarán con los ya tradiciones locales externos y los puestos que ofrecen una amplia variedad en frutas, verduras y una novedosa “boutique” de flores y plantas.
Esta iniciativa, que ya se desarrolló este año durante el período otoñal, se realizará entre las 11 y las 17 y tiene como objetivo fomentar el regreso a las compras en familia: como se recordará, el Gobierno de la Ciudad viene impulsando la recuperación del Mercado Norte para el comercio de cercanía.
Entre las actividades previstas, el ciclo propone ofertas y promociones en los comercios del Mercado y, en el marco del programa Diseña Santa Fe, un paseo de diseñadores donde emprendedores expondrán y podrán vender sus productos a todos los que elijan recorrer el sábado en familia el ya tradicional espacio a escasos metros de la Plaza Constituyentes. Además, el área de Deportes del Gobierno de la Ciudad instalará peloteros y distintos juegos para los más chicos que se acerquen ese día.
El Mercado de todos
Las puertas del Mercado Norte reabrieron para todos los santafesinos el 6 de diciembre de 2010, día en que se inauguraron los locales externos del edificio, en los cuales actualmente funcionan comercios minoristas de diferentes rubros, entre ellos: fábrica de pastas, panadería, fiambrería, quesería, dietética, delivery, bar-restó, cafetería y congelados.
Vale recordar que hasta 2008, el edificio se encontraba en ruinas y sin rastros del viejo esplendor que tuvo en la época en que funcionaba efectivamente como mercado. Hasta 2008, el estado edilicio era deplorable y era utilizado como depósito de vehículos retenidos. Para la puesta en valor del Mercado, el Municipio recibió una subvención de 963 mil euros de la Comunidad Europea, obtenida por la presentación del proyecto “El comercio minorista de proximidad como factor de desarrollo”, que fue elegido entre 250 iniciativas de distintos países. En ese marco, el Gobierno de la Ciudad inició los trabajos de recuperación, no sólo del edificio, sino del Mercado en sí.
La historia indica que el inmueble fue proyectado en la oficina de Obras Públicas municipal y construido por la empresa de Ángel Stamati. Sus planos originales, que datan del año 1927, aún se conservan, y en la “Guía del Turista” del año 1929 aparecen dos fotografías cuyo epígrafe destaca que el edificio del entonces nuevo mercado estaba próximo a habilitarse.
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