La Casa Gris quiere que Santa Fe sea una provincia "sustentable". Deberá reducirse tres por ciento el consumo energético y habrá medidores sanitarios.
La Casa Gris quiere que Santa Fe sea una provincia "sustentable". Para ello creó un programa que exige a todos los edificios y oficinas públicas provinciales aplicar rigurosas medidas de uso racional de la energía, agua y papel para el corto y mediano plazo. Así, habrá medidores de agua en todas las dependencias, los aire acondicionado no podrán estar por debajo de los 25º y se deberá imprimir las hojas a doble faz. El plan también establece la separación de residuos y utilización de energías renovables. Luego la iniciativa se extenderá a hospitales, escuelas y comisarías. Y más adelante a los otros poderes del Estado y a los municipios.
"La idea es predicar con el ejemplo y hacer en el Estado santafesino lo que venimos planteando como necesario ante la sociedad", planteó el secretario de Medio Ambiente, César Mackler quien remarcó que "no se trata de un plan simbólico sino de una verdadera apuesta por una gestión sustentable, basada en indicadores para poder medir su cumplimiento".
El denominado programa "Santa Fe avanza en la sustentabilidad de los edificios y oficinas públicas" fue creado por decreto del gobernador Antonio Bonfatti firmado días atrás en acuerdo de ministros, lo que refuerza la importancia que le asigna la gobernación al proyecto. Más aún: allí se establece que el plan será coordinado por un Comité Interministerial.
"Fue un planteo del propio gobernador avanzar con esta idea. La impulsó Bonfatti con mucha fuerza", remarcó el secretario de Ambiente.
Luz. En materia energética el programa promoverá medidas respecto a la iluminación, acondicionamiento de aire, bombeo de agua y compra de equipos para el uso racional de la energía. El objetivo de mínima apunta disminuir un 3 por ciento el consumo energético en los edificios públicos provinciales que hay en Santa Fe.
En concreto, los equipos de aire acondicionado deberán regularse a 25º, deberán apagarse las luces ornamentales a la hora cero en todos los inmuebles públicos santafesinos y deberán apagarse luces, aire acondicionado y el stand by (modo de espera) de los equipos de computación al finalizar las actividades de cada repartición.
Agua. Referido al agua, se instalarán medidores de consumo en todos los edificios, canillas con pulsador temporizados al mínimo indispensable para el lavado de manos y depósitos de inodoros con doble descarga.
Además, se utilizarán elementos de reducción de paso de agua para mangueras de regado o lavado de vehículos y se incorporará el sistema de riego por goteo para espacios verdes y árboles. Y se reemplazarán los dispenser de agua envasada por dispenser conectados a la red de agua potable interna del edificio.
Residuos. En cuanto a la basura, se separará en origen el 50 por ciento del papel y cartón que se genera en todos los organismos públicos santafesinos, para después realizar su recolección diferenciada en sitios habilitados. Se promoverá el consumo sustentable del papel que se utiliza, minimizando su consumo fomentando la impresión a doble cara de cada foja, la digitalización de los recibos de sueldo y el reemplazo del papel por papel reciclado.
En paralelo, habrá un diseño particular para residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y para la gestión de residuos de talleres automotores como el aceite usado, baterías en desuso y cubiertas en desuso.
Renovables. Respecto a las energías renovables se propicia la utilización de calefones solares para calentar agua con fines sanitarios y se apuesta a generar energía eléctrica a través de sistemas fotovoltaicos.
Según el decreto, se efectuarán jornadas de capacitación y guías de buenas prácticas ambientales, de uso racional de energía y del agua, para capacitar al personal de la administración pública provincial y así generar conocimiento y conciencia ambiental.
Para la implementación del plan, el Comité Interministerial deberá solicitar a los distintos organismos la presentación, en 90 días, de un inventario actualizado de la energía eléctrica y del papel que consumen anualmente.
El texto legal aclara que la puesta en marcha del programa, no debe comprometer el normal desarrollo de las actividades que se realizan en todos los organismos. Pero el incumplimiento de alguna de las medidas establecidas, deberá estar fundamentado.
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