Es debido a la restricción a las
importaciones. Así lo manifestaron desde distintas librerías locales.
Aseguran que hay stock de libros de primaria y secundaria, pero algunos
tienen demoras de entre 10 y 15 días.
La restricción al ingreso de bienes de origen extranjero
también se siente en las librerías santafesinas. Desde estos comercios,
aseguraron a Diario UNO que no están ingresando libros de nivel
universitario y terciario, y sobre todo revistas extranjeras.
“Los de medicina, física y química, por ejemplo, son los que más están faltando. Recién ahora empezaron a entrar otra vez pero hacía dos meses que no se conseguían algunos títulos”, aseguró la encargada de uno de los locales consultados. Explicó que lo mismo sucede con algunas novelas y libros de idioma sobre todo los que se importan de Estados Unidos o Inglaterra.
En este sentido explicó que “hay libros que están faltado porque por más que sean de industria nacional, algunas editoriales estaban imprimiendo fuera del país por una cuestión de costos”. Sin embargo, tuvieron que revertir esta situación y comenzar a imprimir en Argentina
En cuanto a los textos escolares, destacó que no se percibe una gran faltante. “Hay algunos huecos, pero la mayoría de las editoriales que el año pasado editaban afuera se dieron cuenta que iban a tener problemas y comenzaron a hacerlo dentro del país”.
Admitió que el problema tiene que ver con la fluídez en la entrega. “Algunos demoran entre 10 ó 15 días. Estamos teniendo este problema justamente en el inicio de clases.
“Los de medicina, física y química, por ejemplo, son los que más están faltando. Recién ahora empezaron a entrar otra vez pero hacía dos meses que no se conseguían algunos títulos”, aseguró la encargada de uno de los locales consultados. Explicó que lo mismo sucede con algunas novelas y libros de idioma sobre todo los que se importan de Estados Unidos o Inglaterra.
En este sentido explicó que “hay libros que están faltado porque por más que sean de industria nacional, algunas editoriales estaban imprimiendo fuera del país por una cuestión de costos”. Sin embargo, tuvieron que revertir esta situación y comenzar a imprimir en Argentina
En cuanto a los textos escolares, destacó que no se percibe una gran faltante. “Hay algunos huecos, pero la mayoría de las editoriales que el año pasado editaban afuera se dieron cuenta que iban a tener problemas y comenzaron a hacerlo dentro del país”.
Admitió que el problema tiene que ver con la fluídez en la entrega. “Algunos demoran entre 10 ó 15 días. Estamos teniendo este problema justamente en el inicio de clases.
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