La Lepra se impuso 1-0 a Vélez
en el José Amalfitani. A los 45 minutos del segundo tiempo, Pellerano,
de sobrepique y tras un cabezazo de Víctor López, marcó el único tanto.
El triunfo agónico fue justo porque el equipo del Tata Martino le quitó
la pelota a los de Gareca y fue superior casi todo el partido. El
Rojinegro acumula tres triunfos consecutivos, suma 13 puntos y está a
sólo dos del líder Estudiantes.
Alguién deberá buscar a todos esos hinchas de Newell´s que en
la previa firmaban el empate ante el duro equipo de Vélez -y nada menos
que en el Amalfitani- y recordarles que en el fútbol nada está dicho
hasta el último minuto de un partido. Es que La Lepra no sólo le ganó
1-0 a los de Liniers, sino que fue superior el 90 por ciento del
trámite. El premio a los del Tata Martino llegó a los 45 minutos del
segundo tiempo, cuando Hernán Pellerano encontró en el área una pelota
que bajó Víctor López y casi desde el piso marcó el único tanto. El
tiempo de descuento no cambio nada y desató la locura rojinegra.
Es que Newell´s sumó su tercera victoria consecutiva -algo que no
ocurría desde el Clausura 2010- y llegó a los 13 puntos, cuarto en la
tabla y a sólo dos del líder Estudiantes. Además quebró una sequía
histórica ante Vélez en Liniers, a quien sólo le había ganado en 2003 y
en 2009 en este siglo.
Lejos de refugiarse cerca de su arco, La Lepra se plantó bien en mitad
de cancha y fue superior al equipo local. Sólo en el arranque Vélez
insinuó más pero no llevó peligro real al arco de Peratta. Con el correr
de los minutos Newell´s emparejó el trámite en la mitad de la cancha y
empezó a crecer.
Estuvo activo Urruti y sobre todo Sperduti. Figueroa se sumó a la
presión en ofensiva e incluso Pablo Pérez probó dos veces al arco desde
lejos.
La Lepra entonces fue más claro que el local con su estrategia. A los 16
pudo, debió, haberse puesto arriba. Salida rápida y gran pase de
Sperduti a Figueroa, quien quedó mano a mano ante Barovero. Pero el
volante ofensivo volvió a mostrar sus carencias para definir y sacó un
zurdazo mordido y afuera.
No estaba en el Coloso Marcelo Bielsa y entonces Figueroa zafó de los
insultos. Aunque el hartazgo no siempre es exclusivo de los hinchas:
Pablo Pérez reprochó la mala definición de su compañero con un gesto
claro de su brazo, ese que suele estar acompañado de un \"andaaaa\".
El propio Pérez sacó un tercer remate, esta vez de derecha, que se muy
cerca. Daba la impresión que el 8 leproso buscaba el gol pero por
aproximación al arco.
Vélez no reaccionaba y entonces el equipo del Parque seguía controlando
la mitad de la cancha y generando las mejores situaciones. A los 37
Figueroa casi corrige su error y tras una buena jugada desde la
izquierda y hacia el centro, sacó un derechazo que murió en el techo del
arco.
Ante del cierre tuvo la suya Sperduti, que jugó un gran primer tiempo e
hizo recordar al Gordo de torneos anteriores. El delantero peleó, ganó y
casi define de derecha.
El primer tiempo se fue con un 0-0 que antes del partido muchos hinchas
rojinegros hubiesen firmado con alegría, aunque por el trámite (y por
los méritos del equipo del Tata Martino) tenía gusto a poco.
El temible Vélez no apareció tampoco en el segundo tiempo y Newell´s
siguió buscando. Volvió a controlar la pelota y a carecer de definición.
El partido se moría sin goles, y los que firmaron ese empate en la
previa escondían la mano, miraban para otro lado, porque ese pacto no
era conveniente. Pero apareció Pellerano y tiró al diablo cualquier
posible pacto. Víctor López ganó de cabeza en un córner, a los 45
minutos del segundo tiempo, y su compañero de zaga central empujo casi
desde el piso al triunfo tan agónico como justo.
Batacazo. Victoria. Solidez. Y a partir de ahora, más allá de que la
pelea de Newell´s es sumar para no complicarse con los promedios, ¿quién
se anima a firmar algo por anticipado o a ponerle un techo a un equipo
que ya evidencia los cambios que le impuso su DT y símbolo, Gerardo
Martino?
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