El dirigente político al que
presentaron como simple \"obrero\" se suma a una serie de personas
\"anónimas\" que en realidad estaban vinculadas al Gobierno.
La Presidenta Cristina Fernández dialogó el jueves con Armando
"Antonio" Domínguez en una videoconferencia durante el acto de
inauguración de una nueva fábrica. Pero mientras se lo presentó como un
simple trabajador cementero de Olavarría ("vox populi", exclamó la
mandataria), se omitió decir que es un dirigente político y un peso
pesado del Partido Justicialista. El caso de este "falso positivo" no
fue el primero en el kirchnerismo. En los últimos años hubo otros casos
de personajes espontáneos y "anónimos" que aplaudieron, elogiaron o
hasta defendieron violentamente la gestión kirchnerista camuflados como
"pueblo". El empleado del mes. "Antonio, vos no sos dirigente político,
sos un trabajador que defiende su lugar de trabajo", dijo la Presidenta.
Sin embargo, Domínguez forma parte del secretariado general de AOMA
(Asociación Obrera Minera Argentina) de Olavarría desde hace 19 años y
fue el interventor en la seccional de San Juan durante alrededor de un
año. Además, fue presidente del PJ de Olavarría. En una entrevista,
cuenta que tiene más de treinta años de militancia. Ruralista camuflado.
En el funeral de Néstor Kirchner, el titular de la Sociedad Rural de
Morteros (Córdoba), Ider Peretti, se acercó a la familia presidencial
como un ciudadano de a pie y, entre otros halagos, dijo que “el campo
nunca tuvo tanta rentabilidad” como con los K. Sin embargo, el saludo y
agradecimiento de Peretti se explicaba por su buena sintónia con el
Gobierno.. El enero de 2009, el secretario de Comercio Interior,
Guillermo Moreno, acudió a una reunión con Peretti en la Sociedad Rural
de Morteros y a las pocas horas el quincho del lugar fue incendiado. El
funcionario luego respaldó a Peretti. Después del sepelio del ex
Presidente, Peretti compartió escenario con la misma presidenta en un
acto en Córdoba y brindó un discurso oficialista. Un barítono familiar.
Otro "falso positivo" del funeral de Néstor Kirchner fue el recordado
barítono que entonó una emocionante Ave María en honor al ex Presidente
frente a las cámaras de TV. Ernesto Bauer conmovió a todos por su
espontaneidad y talento, aunque se trataba del hermano del cineasta y
director del Sistema Nacional de Medios, Tristán Bauer, quien
regularmente visita a la Presidenta en la Quinta de Olivos. "Pitu" sin
tierras. Alejandro “Pitu” Salvatierra emergió como líder de la toma del
Parque Indoamericana a finales de 2010, como la voz de los sin-tierras
que pedían una vivienda. "Pitu" incluso se reunió en Casa de Gobierno
con el entonces ministro del Interior, Aníbal Fernández, y el jefe de
gobierno porteño, Mauricio Macri, para destrabar el conflicto en la
madrugada de un viernes. En pocos días, Perfil.com reveló que, en
realidad, se trataba de un militante K de Villa Lugano que pertenece a
la Tendencia Nacional y Popular del legislador porteño Francisco “Tito”
Nenna que apuntalaba la candidatura porteña de Daniel Filmus. Además,
"Pitu" trabajaba en la Fundación Madres de Plaza de Mayo, de la que fue
echado a semanas de la toma de Soldati. Patota morenista I. El 8 de
enero de 2010, en plena "crisis" por las reservas del Banco Central, un
grupo de empleados del BCRA se presentó en la puerta de la entidad para
respaldar a Martín Redrado, que se enfrentaba a la Rosada. De pronto
irrumpió para impedirlo un grupo de "autoconvocados" que no resultaron
ser tales. Eran militantes K de la Matanza y hasta un funcionario del
INDEC, Claudio Comari, bajo las órdenes de Guillermo Moreno. Patota
morenista II. Alfredo De Angeli fue recibido con huevazos y trompadas en
una jornada cárnica en la localidad bonaerense de Azul. No llevaban
banderas K ni ningún distintivo político. Pero este medio los
desenmascaró. Se trataba de otra "patota" de Moreno encabezada por
Fabián Ochoa, el secretario general del Sindicato de Mercado de Hacienda
de Liniers que respondió al influyente funcionario. Ibarrazo. Fuera del
ámbito puramente kirchnerista, el legislador Aníbal Ibarra vivió uno de
los mayores papelones de su carrera política cuando filmaba una nota
para Telenoche en la campaña legislativa de 2009. A medida que lo
entrevistaba Daniel Malnatti se le acercaban presuntos "vecinos de
barrio" para felicitarlo y pedirle que "vuelva" tras ser destituido como
jefe de gobierno porteño por la tragedia de Cromañón. El mismo equipo
de Telenoche se dio cuenta del engaño: los "vecinos" ibarristas estaban
contratados. Hasta tomaron el momento cuando el legislador le pedía a
sus "seguidores" que dejaran de acercarse a él para saludarlo. Ya era
tarde.
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