El fiscal Alvaro Garganta, que investiga el cuádruple crimen cometido en La Plata, envió a analizar 50 nuevos elementos hallados en la casa donde el 15 de noviembre asesinaron a tres mujeres y una niña, con el fin de hallar ADN.
En los primeros elementos sometidos a peritajes se halló un patrón genético masculino que no pertenece al karateca Osvaldo Martínez (27), quien cumple prisión preventiva como partícipe necesario de los homicidios.
El fiscal informó a Télam que pidió a la Asesoría Pericial de la Suprema Corte bonaerense que se busquen patrones genéticos en picaportes de la casa y en elementos del baño, éste último donde fue atacada la novia de Martínez, Bárbara Santos (29).
"Como no se pueden hacer todos los análisis juntos, primero se envió a la Asesoría lo que podrían haber sido las armas: el palo de amasar y los cuchillos encontrados“, explicó Garganta, en alusión a los elementos en los que se halló el ADN diferente al de Martínez y que aún no se sabe a quién pertenece.
Afirmó el fiscal que "ahora se mandaron otras cosas que se consideran importantes, pero no prioritarias, porque se busca un patrón genético, masculino o femenino, nuevo o no“ y graficó que "quizá salga el de Martínez porque él iba a la casa todos los días“.
Precisó, además, que en el caso en que se halle patrón genético del karateca, "hay que ver dónde se encuentra y todos los detalles“, y dijo que los resultados estarán listos en la segunda semana de enero.
La decisión se adoptó luego de que el ADN encontrado en las uñas de dos víctimas, en dos cuchillos, en una canilla y en un palo de amasar no corresponde a Martínez.
Sin embargo, el fiscal halló otros indicios en su contra y el juez de Garantías Guillermo Atencio dictó la prisión preventiva del karateca.
Una de las principales pruebas en su contra es que el remisero Marcelo Tagliaferro lo identificó como la persona que la noche de los crímenes le abrió la puerta a una de las víctimas, la hizo pasar y le pidió a él que se fuera.
También se tuvo en cuenta la declaración de un vecino que vio llegar al imputado a su casa la madrugada de los crímenes y entrar violentamente con su auto, pese a que Martínez asegura que a esa hora estaba durmiendo.
La defensa apeló la prisión preventiva y también presentó un hábeas corpus, pero la Cámara Penal platense lo rechazó por entender que había utilizado lo que se denomina "doble vía" al presentar los dos planteos.
Martínez, está detenido como partícipe necesario de los homicidios de su pareja Bárbara y de la madre de ésta, Susana de Barttole (63); de su pequeña hija, Micaela Galle (11), y una amiga de la familia, Marisol Pereyra (35).
Martínez aseguró que "un monstruo" le robó a la persona que ama, al referirse a su asesinada novia Bárbara Santos, y consideró un "error" confundir a un "celoso con un cuádruple homicida".
En una segunda carta conocida hoy, el karateca volvió a negar que controlara de manera obsesiva a su novia, como le atribuye el fiscal.
"Un monstruo me robó a la persona que amo, robó nuestros sueños y nuestro futuro, pero fue la justicia la que me robó la libertad...", escribió el detenido desde la cárcel.
Y agregó: "Mientras todos lloran y se abrazan los unos a los otros para consolarse, yo paso mis penas sólo en un cubículo de dos por dos, abrazado a un colchón y en la mano una foto de Barby que saqué de un diario que me trajo mi hermano".
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