En Bulevar y Laprida, inspectores municipales retuvieron el vehículo de un hombre de mediana edad, luego de que el test de alcoholemia le diera positivo. Tampoco tenía los papeles en regla.
En diálogo con quien manejaba el rodado, los inspectores detectaron rastros de consumo etílico y procedieron a efectuarle un test de alcoholemia. El resultado dio positivo, en un volumen de un gramo de alcohol en sangre.
Cabe destacar que esta cifra es el doble del límite permitido para un conductor particular (0,5 gr) y una infracción de mayor gravedad en este caso, dado que quienes tienen licencia para transportar personas tienen un límite de tolerancia cero en consumo de alcohol; por lo cual esta falta implica, como mínimo, una inhabilitación por tiempo determinado para conducir.
Ante la consulta de Diario UNO, Gabriel Cantelli, coordinador ejecutivo de Tránsito y Seguridad Vial del municipio, confirmó la información y agregó que este hecho ocurrió cerca de las 6 del domingo pasado, sobre Bulevar Gálvez, en la mano que va desde la Costa hacia el centro, en ingreso a la ciudad.
“Se detecta una trafic con personas dentro, que iban sacando los brazos por las ventanas. Un inspector los ve y los para, para resguardo de los chicos que venían dentro del vehículo. La intención era recomendarle al conductor que controle a los chicos. Se le solicita la documentación y, en la conversación, el inspector detecta en el aliento olor a alcohol; procede al control de alcoholemia, arroja resultado de más de un gramo de alcohol en sangre”, relató el funcionario.
Además de la grave infracción cometida, este conductor tenía la tarjeta verde vencida y no era propietario del vehículo; por lo cual no se encontraba habilitado para conducirlo.
En cuanto a los 20 chicos, todos menores de 18 años, “como nadie podía conducir el vehículo porque la tarjeta verde estaba vencida, una mujer que acompañaba al conductor se hizo cargo de llamar a los padres y de trasladarlos en vehículos de alquiler”, explicó Cantelli.
En relación a la reacción del conductor al retenérsele el rodado, el funcionario destacó que “se le explicó, no tuvo ninguna reacción violenta, aunque se sintió mal por el riesgo en el que puso a los chicos”.
Sobre el resultado de este operativo, el coordinador ejecutivo de Tránsito y Seguridad Vial del municipio consideró que “se previnieron dos situaciones: por un lado el peligro de los chicos que sacaban el cuerpo fuera del vehículo y por otro lado la conducción peligrosa”.
Por último, recomendó a los papás que tengan precauciones a la hora de contratar un servicio de transporte para sus hijos; aunque cabe destacar que en este caso el vehículo contaba con la habilitación municipal correspondiente y fue el conductor quien incurrió en una falta en su accionar.
Los controles
Desde la noche del pasado viernes 25 y hasta la madrugada de ayer, personal de la Secretaría de Control llevó adelante distintos operativos de tránsito para verificar la documentación de vehículos, el cumplimiento de las normas viales y realizar tests de alcoholemia en diferentes puntos de la ciudad. Como resultado de los trabajos desempeñados, se retuvieron 86 vehículos.
Según se detalló, durante las inspecciones –que cuentan con la presencia de personal policial perteneciente a la Unidad Regional I–, se retuvieron 26 autos (22 por detectarse alcohol en sangre), y 60 motos (11 por alcoholemia).
Por otra parte, durante los controles municipales se labraron siete actas por venta de alcohol fuera de horario.
Las acciones se desarrollaron en comercios ubicados en calle Güemes al 5.300, Salvador del Carril al 2.200, J. M. Zuviría al 1.800, Bulevar Gálvez al 1.500, Alberdi 2.700, Belgrano al 2.000, y Castelli al 3.200.
A su vez, se procedió a la clausura de un comercio ubicado en Zavalla al 1.000, y se notificó a otros cuatro negocios para que acaten la normativa en cuanto al expendio de alcohol; de lo contrario, y en caso de comprobarse reincidencia, serán clausurados.
Los comercios en cuestión están ubicados en calle Corrientes al 2.600, Pedro Víttori al 3.500, Bulevar Pellegrini al 2.000, y en Santiago del Estero al 2.500. Cabe recordar que está prohibida la venta de bebidas alcohólicas para menores durante las 24 horas y para todo público en el horario de 24 a 8 de la mañana, de acuerdo a lo estipulado por la Ordenanza Nº 11.739.
Por otro lado, desde la dependencia detallaron que, en el marco del régimen de locales de espectáculos y entretenimientos nocturnos, el sábado a la madrugada se labró un acta al Complejo Piedras Blancas por no respetar el rubro para el que se encontraba.
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