Al menos dos casos ocurrieron en la localidad de Humberto Primo. Si bien todo quedó al descubierto, trascendió que los damnificados otorgaron números de tarjetas telefónicas.
El primer caso se dio con un joven, que se encontraba de viaje y tenía el celular apagado, cuyo padre recibió un llamado donde se le advertía que su hijo estaba secuestrado. De acuerdo a la información que se maneja, el padre no pudo comunicarse con su hijo y, durante ese lapso, decidió pasarle números de tarjetas telefónicas a quien lo llamó. Al tiempo, logró hablar con su hijo y todo quedó al descubierto.
El otro caso involucró a un matrimonio cuya mujer recibió un llamado donde le manifestaron que su esposo se hallaba secuestrado. Al igual que el caso anterior, la mujer no pudo contactarse con su pareja y decidió adquirir tarjetas telefónicas por un monto de $1600. Acto seguido, le pasó los respectivos números al victimario. Al cabo de un par de horas, los integrantes del matrimonio lograron comunicarse.
No es la primera vez que se producen delitos de estas características en la región. Cabe recordar que, hace un par de meses, en la localidad de Sunchales también se registraron varios casos. A raíz de eso, la policía dio detalles y recomendaciones sobre la forma de manejarse ante una situación así.
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