Desde la semana pasada, distintos dirigentes del Frente para la Victoria le exigen al vicepresidente, Julio Cobos, que no encabece la ceremonia, como estipula la Constitución Nacional. Pero el mendocino dice que dará un paso al costado sólo si se lo piden formalmente.
El diputado Carlos Kunkel fue uno de los primeros en cuestionar la presencia del radical que acompañó al kirchnerismo hasta el voto “no positivo” sobre las retenciones móviles. A partir de julio de 2008, el vice fue tratado como “traidor” por los oficialistas de todos los niveles y hoy el kirchnerismo quiere bajarlo de la jura.
"Hay que evitarle el paso por situaciones incómodas o por el ridículo. Por él, no por el resto. Los que lo levantaron como el salvador de la Patria y el estadista que podía gobernar, ahora cambiaron de idea", justificó irónicamente Kunkel en Radio La Red. "Al boxeador vapuleado no lo podemos seguir hasta el vestuario para seguir pegándole", insistió.
En el medio del conflicto, se metió Amado Boudou, el ministro de Economía que sucederá a Cobos a partir del 10 de diciembre cuando comience la segunda presidencia de Cristina. Además de cuestionarle su presencia en la ceremonia, lo criticó por las últimas designaciones que el mendocino hizo de personal en la Cámara Alta presuntamente extemporáneas a pocos días de retirarse del cargo.
Pero fue este miércoles que el senador y titular del bloque del FPV en el Senado, Miguel Angel Pichetto, adelantó la estrategia del oficialismo para sacar a Cobos de la jura de Cristina. "Habría que leer la Constitución, artículo 93", recomendó.
El artículo de la Carta Magna dice: "Al tomar posesión de su cargo, el presidente y vicepresidente prestarán juramento en manos del presidente del Senado y ante el Congreso reunido en Asamblea, respetando sus creencias religiosas”.
"Así como el senador (José) Pampuro, que es el presidente provisional, y el actual presidente de la Cámara de Diputados (Eduardo Fellner) no van a estar en la ceremonia como autoridades del Congreso para esa jornada, entiendo que la autoridad máxima va a ser la presidenta provisional" designada hoy, dijo Pichetto en alusión a Beatriz Rojkés, esposa del gobernador tucumano, Jorge Alperovich, y una mujer cercana a la Presidenta.
En el Gobierno ya piensan que será ella y no Cobos quien esté al frente de la Asamblea Legislativa el sábado que viene. "Me encantaría -reconoció Rokjés- Sería un gran honor, que jamás hubiera soñado".
Sin embargo, el mendocino adelantó la semana pasada que sólo se bajará de la jura "si hay un diálogo con el oficialismo" y se lo piden formalmente. Mario Abed, intendente cuyano de Junín y hombre cercano al vicepresidente dijo que "si no quieren, Cobos cumplirá su mandato, se irá a su casa sin hacer escándalo". Lo cierto es que Cristina comienza su segundo mandato con un pequeño conflicto institucional que se convirtió en novela.
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