anuncio

anuncio

anuncio

anuncio

miércoles, 9 de octubre de 2013

ROSARIO: Discusión de "locos" en pleno Boulevard Gálvez

Una discusión callejera de las muchas que suceden a diario terminó en un incidente grave. Uno de los involucrados, un ingeniero, amenazó al otro con una pistola de grueso calibre. Todo un indicador de la violencia en que se vive por estos tiempos.
.
Discusión de

 Hace tiempo ya que en la ciudad se multiplican los casos de problemas sencillos que terminan en incidentes de gravedad, por el nivel de miedo, tensión y enojo que se respira en las calles. “Conflictos simples, resoluciones violentas”, se tituló en estas páginas -a principios del mes de agosto- una nota que reflejaba tres episodios con similares características: un adolescente apuñalado por su propio hermano, una pelea a martillazo limpio entre un mecánico y un cliente, y una gresca entre automovilistas que acabó con una joven inconsciente por un golpe con una pesada herramienta. Esta mañana, se inscribió un nuevo capítulo, en el comienzo de bulevar Gálvez, frente a la Estación ferroviaria General Manuel Belgrano, a metros de calle Vélez Sarsfield.
Eran aproximadamente las 7.30 de hoy cuando todo comenzó. Un hombre de 45 años que conducía una motocicleta subió a la vereda. “Es un cliente habitual. Todos los días estaciona su vehículo fuera de la calle, porque a esa hora pasan muchos autos y colectivos. Siempre me compra cigarrillos y después se va”, relató esta mañana el comerciante que atiende un kiosco en el lugar.
En su recorrido, el motociclista esquivó a un peatón, un profesional de 47 años, ingeniero químico. Este hombre, muy bien vestido, le recriminó al otro porque circulaba por la vereda. Se generó entonces un cruce de palabras, los tonos se fueron elevando y a las amenazas siguieron a los insultos.
El conductor de la moto estacionó su rodado y decidió enfrentar a su oponente. A paso firme se acercó, pero quedó congelado a mitad de camino. Es que el peatón le hizo frente, quedó parado en el lugar y se levantó la camisa para mostrar una pistola de grueso calibre que llevaba oculta en la cintura.
Afortunadamente, ninguno de los dos subió otro “escalón”. El hombre armado siguió su rumbo, mientras el otro buscó auxilio en un policía que justo pasaba por el lugar. El uniformado se desempeña en la Comisaría 24, en el Distrito de Alto Verde, y regresaba a su hogar tras cumplir con su horario de trabajo.
A pesar de estar franco de servicio, el agente fue tras los pasos del profesional y lo interceptó en la esquina de calle Güemes.
El ingeniero químico terminó detenido. En ningún momento ofreció resistencia y en su poder tenía una pistola calibre 9 mm marca Pietro Beretta, con dos cargadores con proyectiles (30 en total). El hombre cuenta con el permiso correspondiente para la tenencia del arma, pero no para la portación. Por otra parte, las balas son de “punta hueca”, totalmente prohibidas por el daño que pueden causar al impactar.
El arrestado y los elementos incautados fueron trasladados a la Seccional 3a. de nuestra ciudad, donde se labraron las actuaciones. La causa quedó caratulada como “portación indebida de arma de uso condicional (de guerra)”. Según pudo saberse, el profesional iba a ser dejado en libertad en horas de este mediodía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario