El diputado provincial Héctor
Acuña pedirá hoy sobre tablas para su tratamiento el proyecto que
reclama “que la Empresa Provincial de la Energía se abstenga de cobrar
el último aumento en las tarifas, a todos aquellos usuarios que hayan
sufridos cortes en el suministro, por más de 24 horas acumuladas desde
que se iniciaron los mismos, hasta que el servicio se vuelva a prestar
normalmente”. Además la iniciativa exige que “respecto de aquellos
usuarios que hayan abonado dicho aumento, el mismo se les deberá deducir
en la factura inmediata posterior”.
El proyecto solicita tambiénque “en el caso de industrias y
comercios habilitados por la normativa vigenterespectiva, se deberá
tener en cuenta el daño emergente y el lucro cesante comocomponentes
indemnizatorios o resarcitorios a los mismos”
Según Acuña “estamosfrente a la prestación monopólica de un servicio por
parte de una empresa delEstado (Ley 10.014), pero ello no constituye
una circunstancia que releve deresponsabilidades en dicha prestación del
servicio, sino que además de losrequerimientos y responsabilidades
propios de la Ley, le alcanzan lascuestiones vinculadas a la natural
relación entre un prestador de un serviciopúblico y un usuario”, señaló.
En los fundamentos de lainiciativa Acuña expresa que “los siete aumentos
que dio este gobierno solosurtieron efectos en los bolsillos de los
contribuyentes pero no mejoraron laprestación, razón por la cual la
tarifa dejó de ser retributiva de un buenservicio, violentando de este
modo la expectativa que tuvo el usuario.”
La iniciativaparlamentaria cuenta con el apoyo de la bancada
justicialista y los diputadospor el PRO. Cabe recordar que este
miércoles, el ministro de Aguas, ServiciosPúblicos y Medio Ambiente de
la provincia, Antonio Ciancio, y el titular de laEmpresa Provincial de
la Energía, Daniel Cantalejo, asistieron a la Legislaturapara dar cuenta
de las inversiones realizadas en la EPE y de los problemas padecidospor
los usuarios durante el verano.
“La EPE con el aumentodel 23,02% va a recaudar aproximadamente 470
millones y la baja del subsidio leimplica sólo una perdida de 240
millones de pesos; es decir, la voracidad recaudadorahace que el
gobierno de Binner y Bonfatti le expriman los bolsillos a la gentepara
seguir teniendo una tarifa alta a costilla de los santafesinos.
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