El miércoles a las 16, se realizará un segundo encuentro entre choferes y funcionarios para definir medidas que garanticen el funcionamiento seguro de las líneas urbanas los días que hay partido.
El miércoles a las 16, se realizará un segundo encuentro entre
choferes y funcionarios para definir medidas que garanticen el
funcionamiento seguro de las líneas urbanas los días que hay partido.
En la mesa de diálogo se plantearon las aristas generales del problema: los choferes se niegan a continuar transportando hinchas a los partidos de fútbol en condiciones “físicas y de seguridad absolutamente irregulares”; y surgieron propuestas - aún muy amplias - sobre alternativas que permitan continuar con la prestación del servicio en circunstancias “razonables”.
Al menos así resumió el encuentro Miguel Arce, secretario de prensa de UTA seccional Santa Fe. “Fuimos ( a la reunión de ayer) a plantear formalmente el reclamo y exponer los detalles de la situación que estamos atravesando los trabajadores del sector de transporte público. En realidad, no es nada que los funcionarios con los que dialogamos no supieran. Pero este encuentro dio las formalidades necesarias al pedido y se generó el compromiso de volver a dialogar mañana”, indicó.
Caminos alternativos
Para los trabajadores, las expectativas sobre este próximo encuentro son altas. Ayer surgieron ideas generales para resolver el problema: modificar la ruta de alguna de las unidades hasta los estadios de fútbol y de esta manera separar a los hinchas del resto de los pasajeros. “Esta es una iniciativa que algunas empresas ya estaban aplicando en algunos barrios. Entonces se habló de esta posibilidad y también sería analizada”, puntualizó Arce.
Una variante de esta alternativa sería que los pasajeros sean distribuidos en distintas unidades, es decir, que todos los ómnibus de la misma línea realicen el mismo recorrido pero que quienes específicamente se dirigen a la cancha viajen en una unidad dispuesta para ellos. Incluso podría verse la posibilidad de hacer subdivisiones para quienes viajan con menores de edad.
Puntos de control
Asimismo, se tocó la posibilidad de que algunas unidades cuenten con presencia policial o que existan puestos de control en ciertos puntos del camino que debe ser recorrido por los choferes y los pasajeros. De todas maneras, cada una de estas alternativas fue un bosquejo de las ideas que se presentarían en el nuevo encuentro.
Votación en plenario
Sin embargo, los representantes de los choferes ya adelantaron que no aceptarán ninguna propuesta sin consultarla con los trabajadores “ya que son ellos quienes sufren las consecuencias en forma directa”, expresó Arce.
“Todo lo que se hable - continuó - y lo que se proponga en estos encuentros, va a ser comunicado al cuerpo de delegados y el viernes vamos a realizar una reunión plenaria y entonces se tomará la decisión. Si nos garantizan poder salir a trabajar tranquilos, seguramente la moción va a ser prestar el servicio normalmente. Si el proyecto es viable, estaremos ansiosos por ponerlo a prueba. Es que nuestro problema en este momento es muy específico y la seguridad no es factible de negociación: o trabajas en condiciones razonables o no”.
Esta votación se realizaría el viernes 27, durante un plenario de delegados en la sede de UTA Santa Fe. Sería entonces, cuando se resolvería si el próximo fin de semana se repiten la de fuerza aplicada el sábado pasado, cuando se suspendió el servicio de transporte público de pasajeros durante siete horas (entre las 12 y las 19) precisamente dos horas antes del inicio del partido de Colón. En caso de no llegar a un acuerdo, la suspensión del servicio afectaría a los santafesinos el próximo domingo cuando Unión reciba de local a Olimpo, de Bahía Blanca.
Por su parte, el secretario General de UTA Santa Fe, Osvaldo Agrafogo, se sumó a la descripción de la situación que aqueja a los trabajadores del sector y destacó que si bien la situación se agrava los días que hay encuentros deportivos, la inseguridad se siente en forma permanente.
De secuestros y rehenes
“Nosotros nos venimos quejando de este problema desde hace mucho tiempo. Lo que ocurrió es que el clásico entre Unión y Colón mostró de forma muy grosa lo que estaba pasando. La imagen de los hinchas subidos a los techos de los colectivos y con medio cuerpo fuera de las ventanillas ya no necesitan más explicaciones”, opinó tajante Agrafogo.
“Los colectivos parecen secuestrados y los choferes rehenes de esa situación”, graficó y calificó como “incomprensible” el comportamiento de ciertos pasajeros.
Además, Agrafogo dijo que la suspensión del servicio decretada el pasado sábado fue una medida de fuerza pensada como última instancia por la gravedad de los hechos y que no había sido realizada antes porque el gremio estaba en medio de una discusión salarial y que ambos temas no debían ser confundidos.
“Si estamos realizando estas reuniones es porque realmente queremos buscar una solución al problema. Nosotros sabemos que con las medidas de fuerza perjudicamos a muchos usuarios que necesitan el transporte para ir a trabajar o que no tienen nada que ver con esos que casos que puntualizamos. Pero lo cierto es que los choferes solos no podemos hacernos cargo de lo que estamos pasando. Un chofer no puede resolver la situación por su cuenta, pero si sucede algo, es seguro que va a ser el único sancionado”, cuestionó el gremialista.
“Nosotros sinceramente creemos que aún estamos a tiempo para resolver el problema. Tenemos la posibilidad de hacer propuestas, de analizarlas, ponerlas en práctica y no dejar que la inseguridad nos gane a los santafesinos”, concluyó, con un mensaje positivo.
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