El último adiós al músico, que
falleció ayer a los 62 años, se realizó de forma íntima entre los
familiares, amigos y colegas. Las puertas de la casa velatoria cerraron a
las 5. Al mediodía, partirá el cortejo fúnebre hacia un cementerio de
Pilar, donde el cuerpo será cremado.
Un vehículo de la casa velatoria llegó pasadas las 21:30 a la
vivienda de Luis Alberto Spinetta, ubicada en la calle Iberá al 5.009,
en el barrio de Villa Urquiza, para retirar los restos del músico y
cumplir con los deseos de la familia de realizarle un último adiós
íntimo. Sus cuatro hijos, Catarina, Vera, Dante y Valentino, estuvieron
en el momento de su muerte y más tarde Dante fue quien pidió a la prensa
que no se viera el cuerpo de su padre, mientras vecinos y fanáticos
lloraban y lo recordaban en la puerta de su casa, dejándole mensajes y
flores y aplaudiéndolo. Por su parte, su hija Catarina se retiró con su
pareja Nahuel Mutti minutos antes de que llegara el vehículo en el que
retiraron a su padre. La DJ se fue en el más absoluto silencio, rumbo al
velatorio que se realiza en O\'Higgins 2842, en el barrio de Belgrano.
El primero en llegar fue el cantante Ricardo Mollo, que no pudo
ingresar en ese momento y se fue a esperar a un bar cuando le informaron
que comenzarían a verlarlo a la 1 de la madrugada. Más tarde se
asomaron otros colegas como Juanse, Fito Páez y los integrantes del
grupo Babasónicos, entre otros. Spinetta será velado hasta el jueves a
las 12 del mediodía cuando el cortejo fúnebre parta hacia el cementerio
Memorial, de Pilar, para realizar allí la cremación de los restos.
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