Lo afirmó esta mañana Guillermo Laura, de la Fundación Metas del Siglo XXI, quien impulsa en el Congreso una ley que modifique el financiamiento de las grandes obras viales que se necesitan en el país.
En contacto con el programa Dos tipos audaces de La Ocho, el especialista sostuvo que el problema en la actual red de carreteras del país “es la estructura de diseño. Las rutas tienen el mismo ancho que un arco de fútbol, siete metros. Allí se cruzan a cien kilómetros por hora, que es la velocidad permitida, camiones y ómnibus de dos pisos. Y algún error de cálculo, alguna distracción, provoca una tragedia”, sostuvo el ingeniero.
Laura puso como ejemplo Estados Unidos a seguir o implementar en Argentina. “En 1956 implementó una red de autopista troncal, que es la que une todo lo importante, las ciudades grandes y países limítrofes. Para Argentina es significarían unos 13.500 kilómetros de autopistas”, afirmó.
Según el especialista, con esas obras "se eliminarán siete de cada ocho muertes" en las rutas argentinas. El 87 por ciento de las muertes bajaría si se diseñan estas autopistas. Ese el gran desafío que plantea el crecimiento del parque automotor. En 1930 había 300 mil autos, hoy hay 9 millones y para el 2020, que no están lejos, se prevé que habrá 20 millones de coches. La producción va a aumentar, va a ver más camiones en las rutas y vamos a tener que llorar mucha más gente muerte".
"El sistema actual de rutas que hace Vialidad, que siempre construye, es muy lento. Se concretan 26 kilómetros por año. A ese ritmo se va a tardar más de 400 años en integrar el territorio. Lo que hay que hacer es pasar a un sistema distinto, que transforme los 26 kilómetros anuales en 1.300 kilómetros. Para eso hay un proeycto en el Congreso de la Nación, en la comisión de Transporte. Es un sistema libre de peaje, es decir se levantarían todas cabinas en las rutas nacionales. La inversión es privada y se recupera por peaje indirecto, que son unos centavos por litros de combustible que se empiezan a pagar cuando la obra ya está hecha, para proteger al usuario", remarcó.
Laura consignó que la poca construcción de autopistas en el país no se debe a una cuestión de financiamientos. "No es por falta de recursos. Sino de gestión o procedimiento que se garantice que la plata que se paga por carreteras van a las carretaras. Los argentinos pagamos 4 mil millones de dólares en impuestos. Ese dinero alcanza para pagar cash 2 mil kilómetros por año. Y estamos haciendo 26 kilómetros. Hay una pequeña diferencia. Si pensamos que podemos pagar 2 mil kilómetros por años, en una década se podrían construir 20 mil kilómetros. E hicimos la autopista a Córdoba que son 400 kilómetros, es decir el dos por ciento en casi 20 años".
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