Newell’s necesita un triunfo terapéutico. Un bálsamo de rehabilitación. Precisa la complicidad de tres puntos para descomprimir tensiones y regresar a su huella original.
.La Capital |
Newell’s necesita un triunfo terapéutico. Un bálsamo de rehabilitación. Precisa la complicidad de tres puntos para descomprimir tensiones y regresar a su huella original. Lleva diez partidos sin ganar y quiere instalar un punto de quiebre definitivo a esta situación incómoda que lo invade e incomoda. Por eso, el choque de esta tarde, a las 17, frente a Gimnasia y Esgrima en el bosque platense, por la segunda fecha del torneo Final, representa una posibilidad importante para cambiar de paso y retomar el envión perdido desde hace un largo tiempo.
Si bien el año recién arranca, después de la improductiva igualdad sin goles con Boca, en el Coloso Marcelo Bielsa, y el traspié sufrido en la excursión copera en Medellín, los números empezaron a asociarse socarronamente con males del campeonato anterior. Y los interrogantes se reprodujeron por la ausencia de una victoria liberadora.
En tanto no aparezca ese gesto contundente, ese trazo divisor en el recorrido leproso, las especulaciones seguirán tomando forma y conspirando contra el normal desarrollo de un cuatrimestre que se presenta muy exigente, con varias competencias abiertas.
Con este panorama, lo que hace algunas semanas asomaba como un partido en el que se podían tomar algunas licencias, transformó su fisonomía y adquirió un ropaje de mayores necesidades. Y así, el equipo que pondrá Alfredo Jesús Berti en cancha será un mix que contendrá un sensible aporte de titulares (ver aparte). Con la intención de achicar el margen de error y otorgarle más sustento a la propuesta que se utilizará en el viejo estadio tripero.
Newell’s debe recuperar su nivel futbolístico. Ese es su desafío inmediato. Individual y colectivo. Para no facilitarle espacios a ningún tipo de cuestionamiento, ni a los dictámenes apresurados. Para no perder el tren de sus propias ambiciones. Para recobrar intensidad, poder de fuego y demostrarse que su espíritu lúdico y su capacidad de batalla siguen encendidos. Para atrapar una oportuna señal de alivio.
La incursión al bosque de esta tarde es toda una figura representativa de este momento rojinegro. Porque tendrá que saber moverse con astucia y agilidad para no quedar atado a cuestiones intrincadas. Para encontrar sus rastros en la espesura de su propia naturaleza.
Por todo eso necesita un triunfo. Para estar más cerca de su esencia y sus pretensiones.
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