Ocurrió en Neuquén. Poco después de la ceremonia la familia fue advertida por personal de la morgue. Ahora la viuda dice que se siente "engañada".
El Litoral
Una familia de Junín de los Andes, Neuquén, creyó haber velado y sepultado a uno de sus integrantes, un hombre de 44 años, pero poco después de la ceremonia fue advertida por personal de la morgue de que el cuerpo continuaba allí y habían retirado el ataúd vacío.
La insólita situación se produjo tras el fallecimiento por causas naturales del hombre, ocurrida en la zona de Pilo Lil, a unos 30 kilómetros de Junín de los Andes, adonde el pasado 22 de diciembre había ido a pasar unos días a la casa de unos familiares.
Como el hombre no regresó a Junín para Navidad, sus hermanos se preocuparon y denunciaron su desaparición por lo que se inició una búsqueda que terminó con el hallazgo del cuerpo en un camino rural.
En cumplimiento de las normas ante estos casos, el cadáver fue llevado a la ciudad de Neuquén para practicarle la autopsia, donde se constató que había muerto debido al agravamiento de una enfermedad crónica que padecía.
Luego fue regresado a la morgue del hospital de Junín para ser entregado a sus familiares, reveló el diario La Mañana de Neuquén.
La familia retiró el ataúd de ese lugar suponiendo que dentro estaba el cuerpo y realizó el velatorio en un salón comunitario del Barrio Lanín, tras lo cual lo sepultaron en el cementerio parque de la zona.
Luego de esto, personal de la morgue que realizaba tareas de limpieza notó un fuerte olor en el lugar y descubrió que el cuerpo había quedado dentro del cajón metálico en el que había sido trasladado entre Neuquén y Junín y nunca había sido pasado al ataúd de madera dispuesto por la familia.
"Antes en la morgue quisimos ver el cuerpo pero estaba en muy mal estado, porque pasó mucho tiempo hasta que fue encontrado en el campo. Por eso retiramos el cajón cerrado, y resulta que después nos enteramos que estaba vacío. Queremos saber que pasó porque esto no puede suceder", sostuvo una hermana del hombre fallecido.
La mujer adelantó que realizará una denuncia judicial y pedirá una investigación, ya que los familiares se sienten "engañados por lo ocurrido", aseguró. (DyN)
La insólita situación se produjo tras el fallecimiento por causas naturales del hombre, ocurrida en la zona de Pilo Lil, a unos 30 kilómetros de Junín de los Andes, adonde el pasado 22 de diciembre había ido a pasar unos días a la casa de unos familiares.
Como el hombre no regresó a Junín para Navidad, sus hermanos se preocuparon y denunciaron su desaparición por lo que se inició una búsqueda que terminó con el hallazgo del cuerpo en un camino rural.
En cumplimiento de las normas ante estos casos, el cadáver fue llevado a la ciudad de Neuquén para practicarle la autopsia, donde se constató que había muerto debido al agravamiento de una enfermedad crónica que padecía.
Luego fue regresado a la morgue del hospital de Junín para ser entregado a sus familiares, reveló el diario La Mañana de Neuquén.
La familia retiró el ataúd de ese lugar suponiendo que dentro estaba el cuerpo y realizó el velatorio en un salón comunitario del Barrio Lanín, tras lo cual lo sepultaron en el cementerio parque de la zona.
Luego de esto, personal de la morgue que realizaba tareas de limpieza notó un fuerte olor en el lugar y descubrió que el cuerpo había quedado dentro del cajón metálico en el que había sido trasladado entre Neuquén y Junín y nunca había sido pasado al ataúd de madera dispuesto por la familia.
"Antes en la morgue quisimos ver el cuerpo pero estaba en muy mal estado, porque pasó mucho tiempo hasta que fue encontrado en el campo. Por eso retiramos el cajón cerrado, y resulta que después nos enteramos que estaba vacío. Queremos saber que pasó porque esto no puede suceder", sostuvo una hermana del hombre fallecido.
La mujer adelantó que realizará una denuncia judicial y pedirá una investigación, ya que los familiares se sienten "engañados por lo ocurrido", aseguró. (DyN)
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