La Ministra de Educación de la Provincia de Santa Fe, Claudia Balagué, dijo que hay que poner en perspectiva los resultados de la evaluación internacional en la que la Argentina salió con déficit en comprensión lectora. "La prueba Pisa mide un aspecto de la educación que es el de las disciplinas, pero de ninguna manera mide integralmente lo que hoy pensamos en cuanto a calidad educativa", dijo la funcionaria provincial.
La Capital |
"La prueba Pisa mide un aspecto de la educación que es el de las disciplinas, pero de ninguna manera mide integralmente lo que hoy pensamos en cuanto a calidad educativa", dijo la ministra de Educación de Santa Fe, Claudia Balagué, sobre la famosa prueba internacional y los resultados que posicionan a la Argentina con mejoras en ciencias, pero con déficit en comprensión lectora.
Balagué se explayó sobre lo que considera debe ser una evaluación integral de lo que los chicos aprenden en su paso por la escuela. Dijo así que las disciplinas (contenidos como ciencias, matemática o lengua, por ejemplo) son importantes como también lo son otros conocimientos, habilidades y valores.
"Cuando hoy pensamos en la construcción de ciudadanía dentro de la escuela, transferencia de la cultura, en generar el análisis critico de la información y tantos objetivos tan importantes como estos, que en realidad son metas que nos proponemos respecto de la calidad educativa, creo que no hay prueba que los pueda medir", analizó. Advirtió que los resultados de esta evaluación son "un desafío que nos invitan a pensar" más que para buscar culpables. Y agregó que "la prueba Pisa hay que darle el valor que realmente tiene y en función de eso proponer alternativas y mejoras".
La ministra, que participa en Buenos Aires del encuentro "La hora educativa" organizado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), se definió como una defensora de los procesos de "evaluación y autoevaluación donde cada institución puede mirarse a sí misma".
En este sentido, agregó que esos procesos pueden contribuir "a hacer una reflexión propositiva, siempre con el sentido de construcción en la medida que pensamos a la evaluación en función de nuestros alumnos". Para Balagué, las pruebas y evaluaciones "no deben pensarse de manera punitiva ni para generar un ranking, sí para el aprendizaje y la autorreflexión”. También consideró que “siempre tenemos que tender a lo mejor, a mejorar los aprendizajes" y que estas pruebas "nos comprometen a eso".
Balagué ilustró con un ejemplo para explicar que no hay una sola manera para superar los aprendizajes que requieren de atención: "Las Ferias de Ciencias son instancias muy interesantes porque cuando un chico investiga para desarrollar un proyecto, es cuando debe aplicar la comprensión lectora tanto para lengua como para matemática".
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