La pareja detenida el lunes, tras un allanamiento a su casa de barrio Candioti Norte, quedó en libertad tras ser indagada por el juez penal de turno, Jorge Patrizi. Se trata del ex militar y su mujer, quienes se presumía, tenían una clínica encubierta.
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Según fuentes tribunalicias, los agentes policiales llegaron al lugar con una orden de allanamiento por una moto robada. Sin embargo, en la requisa encontraron también materiales de uso médico, instrumental quirúrgico, medicamentos y sellos de profesionales de la salud.
Si bien en un primer momento se analizó la posibilidad de que la vivienda hubiera funcionado como una clínica clandestina, la posibilidad fue descartada ayer por el juez Patrizi. Las primeras investigaciones indicarían que los sellos no pertenecen a médicos santafesinos, y una de las hipótesis es que esos elementos podrían haber sido parte de algún botín.
El delito de tenencia de arma de guerra sin la debida autorización –previsto en el artículo 198 bis del Código Penal– prevé una condena de dos a seis años de prisión.
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