El ex futbolista de River Plate se transformó en la sexta cara nueva en el plantel de Sava y ya practicó por primera vez con sus nuevos compañeroa. Lo de Cosaro está en stand by.
Luciano Germán Vella nació el 13 de abril de 1981 en la ciudad de Rosario y después de haber tenido una charla corta pero concreta con el presidente Luis Spahn y con el técnico Facundo Sava, viajó el domingo por la noche hacia Santa Fe y ayer por la mañana estampó su firma que lo ligará al Tate por el lapso de una temporada.
Apenas confirmó su vínculo con el Tatengue, habló con Ovación sobre su llegada al equipo de Facundo Sava y dijo: “La semana pasada me llamó el presidente de Unión, me mostró rápidamente el interés para que me sumara al equipo y eso me hizo no dudar ante la oferta que me hicieron porque prácticamente arreglamos todo por teléfono y acá estoy firmando el contrato sin ningún problema, así que ahora ya estoy listo para empezar a trabajar con los chicos”.
Inmediatamente, Vella se refirió a lo que significa jugar en la Primera “B” Nacional y sobre todo después de haber estado dos temporadas en River Plate: “Es un campeonato muy lindo para jugar, yo lo hice justamente con River y sé lo que es, pero además es parejo y duro por los rivales que hay, así que la clave creo que estará en convertirnos en un equipo regular para devolver al club a Primera”, señaló el Tano.
Su convencimiento
—¿Por qué te decidiste por Unión?
—Primero porque están armando un plantel para ascender, después porque me gusta jugar en equipos de convocatoria y siempre que vine a jugar acá la cancha estaba llena y sé lo que es Santa Fe, porque es igual que Rosario. Pero también de la manera que me hicieron sentir cuando hablé con Spahn y con Facundo (Sava), me convencieron y no tuve que pensarlo demasiado.
—¿Había otras opciones?
—Sí, había otras alternativas, pero yo quería empezar lo más rápido posible a entrenar con un grupo y los dirigentes me dijeron: ‘Venite ya’, así que acordamos todo rápidamente y no hubo que modificar demasiado en nada.
Su presente
Uno de los aspectos que también es real en la carrera de Luciano Vella es su inactividad oficial, ya que el último semestre en River no fue tenido en cuenta por Ramón Díaz, a lo que el profesional no tuvo problemas en explicar cómo fue su situación en el Millonario. “El último tiempo no la pase bien desde lo futbolístico porque no jugué, después desde lo físico no tendré problemas porque trabajé al máximo y la verdad que también estoy un poco desesperado para volver a jugar, a tener minutos en una cancha y a trabajar con la pelota”, explicó.
—¿Le encontrás alguna explicación por qué Ramón Díaz te borró?
—Fue todo raro, fue decisión del técnico, terminé jugando en el ascenso y después no me puso más. Si hubiese sido por mí me habría ido en enero, pero tenía contrato.
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