Tras la toma del predio de la monja María Jordán en Empalme Graneros, que terminó con un violento desalojo el sábado, los ocupantes insisten en volver si no hay soluciones en el diálogo entre las partes.
/La Capital |
Ademas los ocupantes cargaron contra la religiosa con la que se mostraron "indignadísimos" por sus dichos y a la que le reclamaron apoyo.
"La situación ahora es tranquila estamos en el perímetro del predio y acordamos con la gente que está ahí, la policía y Promoción Social que vinieron a hablar con nosotros, resistir pacíficamente en el cordón del predio hasta tener una respuesta", arrancó diciendo Norma una de las ocupantes.
"Lo que buscamos es un lugar donde poder asentar nuestras viviendas, tenemos la necesidad. Estamos cansados de esperar ayuda y nadie no escucha, parece que si no se hace este tipo de ruido nadie lo hace. Sse que no está bien pero lamentablemente en esta situación no nos queda otra", evaluó.
"Estamos muy dolidos con los dichos de la hermana Jordán, acá somos todos gente común laburante que nos rompemos el alma laburando todos los días", se quejó la mujer. "El tema son las changas, los trabajos en negro, nada nos da la seguridad ni la solvencia para poder llegar de manera legal a comprar un terreno. Ella lo sabe perfectamente, es cierto que hace cosas pero no es suficiente", explicó la referente de los ocupantes.
"Los narcotraficantes no tienen nada que ver con nosotros, a más de uno sin ir más lejos a mi podrían hacerme un análisis ahora y no encontrarían ni alcohol en la sangre porque no tomo", aseguró y aclaró acto seguido que "la gente está indignadísima con esos dichos. Lamentablemente, porque de ella que hace todo este trabajo social lo que esperaremos es apoyo de su parte", reclamó.
"Vamos a resistir, esperamos que todo se haga de manera pacífica, pero si no se llega a una solución favorable lamentablemente vamos a volver a tomar el predio, estamos decididos", concluyó muy segura Norma.
El terreno permanecía despejado desde ayer y bajo una fuerte custodia policial, en tanto vecinos del barrio Toba vigilaban para desactivar cualquier posible ocupación de un terreno descampado de Ottone, San José y Cabal, un espacio de uso comunitario para actividades deportivas.
En medio de la crisis territorial y social las autoridades municipales definirán hoy en la reunión de gabinete el horario y alcance del encuentro de mañana entre las partes.
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